Efecto Tetris, videojuegos

¿Qué es el Efecto Tetris?

Si alguna vez has tenido la sensación de percibir el mundo como aquel videojuego que te tiene tan enganchado, no te preocupes, no eres el único al que le ha pasado. Este suceso se denomina como Efecto Tetris en honor a uno de los juegos más adictivos de la historia.

La década de los ochenta fue muy importante para el mundo de los videojuegos. Miles de hogares contaban con una videoconsola e incluso surgieron los primeros salones recreativos donde podías jugar a numerosos títulos por un módico precio.

En 1984, Alexey Pajitnov desarrolló uno de los juegos más importantes de la historia: el Tetris. Este título entró sin hacer mucho ruido los hogares haciendo que personas de todas las edades estuviesen horas intentando encajar piezas geométricas al ritmo de su peculiar canción.

A finales de la década, Nintendo compró el videojuego y las ventas se dispararon coincidiendo con la aparición de la Game Boy. Esto hizo que la fiebre del Tetris aumentara de forma exponencial.

El origen del Efecto Tetris

El Efecto Tetris data de 1994, cuando un periodista de la revista cultural Wired trató de demostrar qué efectos tenía este videojuego sobre nuestro cerebro. Todo comienza a raíz de que muchos jugadores afirmaban con soñar con piezas del juego y reconocían que tenían la obsesión de querer ordenar lo que veían por la calle como si se tratase un juego.

Uno de los jugadores afectados explicó lo siguiente: «El Tetris esclavizó mi cerebro. Por la noche, las formas geométricas caían en la oscuridad mientras descansaba. Por el día, me sentaba en el sofá y jugaba a este juego con rabia y furia. Cuando salía de casa, encajaba los coches, edificios y peatones«.

En ese instante, la ciencia entró en acción. En el 2000, Robert Stickgold, uno de los investigadores psiquiátricos más importantes de la Universidad de Harvard, se adentró en la investigación.

Para ello, reunió a más de treinta personas, cinco de ellas padecían de amnesia, y les puso a jugar al Tetris durante largos periodos de tiempo. Al llegar la noche, Stickgold preguntaba cada dos horas a sus pacientes por cómo eran sus sueños.

¿Cuál fue el resultado? El 63% de los participantes reconocieron ver durante la noche formas similares a la del videojuego. Tras largas horas delante de la pantalla, los mecanismos del juego quedaban absorbidos por el cerebro y se quedaba grabada en la imaginación. Esto también sirvió para confirmar que los sueños son una forma de reforzar todo lo aprendido durante el día.

Otros proyectos relacionados

Con la aparición de este efecto también se demuestra la influencia que tienen los videojuegos. Este fenómeno se denomina como ‘Game Transfer Phenomena‘ (GTP).

En esta ocasión, un grupo de investigadores analizaron el comportamiento de 42 jugadores habituales que comprendían la de 15 a 21 años. El resultado fue que muchos de ellos integraban elementos de sus títulos favoritos en sus rutinas.

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