Brecha STEM

¿Es posible frenar la creciente brecha de género en los estudios STEM?

La brecha de género en los estudios STEM (Science, Technology, Engineering and Mathematics) se está volviendo a abrir. Esto quiere decir que hace veinte años en España había más chicas matriculadas en estudios técnicos que a día de hoy.

El informe “Radiografía de la brecha de género en la formación STEAM” elaborado por el Ministerio de Educación y Formación Profesional (MEFP) en 2021 constataba que, lejos de cerrarse, esta desigualdad se estaba consolidando un curso tras otro. El último informe Davos del Foro Económico Mundial refleja la misma tendencia. Lo que nos lleva a hacernos una infinidad de preguntas.

¿Es relevante que haya presencia femenina en el mundo STEM?

Un ingeniero, un matemático o un programador diseña, construye, inventa las reglas en las que se basa la tecnología que utilizamos en nuestro día a día. Por ejemplo, Robert Gaskins, Dennis Austin y Thomas Rudkin desarrollaron Power Point y el resultado es que han definido la forma en la que comunicamos un mensaje. Decisiones que impactan la forma de pensar y hacer de todos sus usuarios.

En España, el ámbito profesional STEM está conformado en un 84% por hombres. ¿Qué quiere decir esto? Por un lado, que los puestos con mayor tasa de inserción laboral y mayor estabilidad económica están ocupados por hombres. Por otro, que, a la hora de tomar decisiones, se cuenta con una sola perspectiva que excluye, como mínimo, a la mitad de la población. ¿La consecuencia? Que el mundo está diseñado para un estándar de hombre blanco, de 70 kg y entre 30 y 40 años, en el que no todos encajamos.

Caroline Criado analiza distintas consecuencias derivadas de este modelo sesgado en su libro “La mujer invisible”. Una mujer tiene un 47% más de probabilidad de sufrir lesiones graves en un accidente de coche porque no hay un muñeco de pruebas que contemple su fisionomía, el doble de posibilidades de fallecer tras un infarto de miocardio por su infrarrepresentación en los estudios. Además, un 70% menos de precisión en el software de reconocimiento de voz de Google, por la falta de referencias en las bases de datos. Igual que al escribir palabras como “CEO” en Google Imágenes, se filtra un mayor número de rostros masculinos por cómo está configurado el algoritmo de búsqueda.

¿Cómo atraer talento femenino al mundo STEM?

Vamos a distinguir 3 puntos claves para lograr este objetivo.

1. Tecnología didáctica en educación primaria y secundaria

El MEFP deja claro que las primeras etapas de escolarización son el momento clave para desdibujar la brecha de género STEM.

Desde mi experiencia, puedo afirmar que uno de los factores clave que me ha impulsado a estudiar Ingeniería de Telecomunicaciones es el interés por la robótica y la programación que despertaron en mí dos profesores de mi colegio de educación primaria.

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Crearon un pequeño club de matemáticas y robótica donde dedicaron tiempo a utilizar las nuevas herramientas tecnológicas que se estaban desarrollando para la educación: Scratch, para iniciarse en programación por bloques, o los kits de robótica de Arduino. El colegio empezó a participar en los eventos y competiciones de este ámbito y, curiosamente, el equipo de mi curso solía estar formado casi íntegramente por chicas (entre los 10 y 12 años). El resultado fue que, sin querer, estábamos jugando con lo que ahora es la base de los grados universitarios que muchos de nosotros estamos estudiando.

Creo que es muy positivo que empresas tecnológicas pongan un foco en desarrollar herramientas para los docentes, que hagan que disciplinas como la programación o la lógica matemática (que se han vuelto imprescindibles en el mundo laboral actual) sean accesibles desde un nivel de conocimiento muy básico y casi en forma de juego. Esto eleva exponencialmente la capacidad de captar el interés de cualquier persona y elimina la construcción mental de que la robótica (por poner un ejemplo) es algo super complicado.

A esas edades, las familias están todavía muy implicadas en la educación de sus hijos. Es, por lo tanto, el momento perfecto para desdibujar cualquier rol de género sobre su futuro profesional. Hacer hincapié en que tener profesores dispuestos a estas iniciativas no debería ser una suerte, sino algo básico en cualquier colegio público.

2. La Formación Profesional STEM

Continuamente se publican informes en los que se hace notar la falta de profesionales del ámbito STEM en el mercado laboral. No se cubren estos puestos y no dejan de generarse nuevos. La Formación Profesional (FP) da una respuesta directa a esta demanda, pero en España sigue existiendo una reticencia hacia este camino formativo.

En cuanto a la presencia femenina, cuando miramos todas las familias profesionales en conjunto, observamos un porcentaje de hombres y mujeres prácticamente igualado. En contraste, cuando ponemos el foco en las familias de FP STEM, el MEFP constata sólo un 3% de mujeres matriculadas en 2021. Una brecha de género notablemente mayor a la de los grados universitarios STEM.

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Ahora bien, debido a la fuerte demanda actual, las familias de FP STEM dan acceso directo a los puestos mejor remunerados y con mayor inserción laboral. Si las mujeres no cursan estos estudios, pierden esta posibilidad de una proyección profesional y unos puestos de trabajo estables, que son los que permiten el desarrollo de una vida independiente y autónoma.

Las charlas de información y orientación profesional en los centros educativos de primaria y secundaria son imprescindibles, tanto para padres como para alumnos. Se debe abrir el rango de posibilidades y eliminar los estigmas y la desinformación que existen alrededor de la FP STEM, sobre todo para las chicas.

Asimismo, sería muy positivo impulsar eventos y actividades de colaboración entre alumnos de ESO y FP, enfocadas en el desarrollo de habilidades STEM. Colaborarán en derribar el muro que separa los dos caminos formativos para abrir uno de complementariedad y trabajo en equipo, imprescindibles para enfrentarse al panorama laboral.

Y por supuesto, dar una mayor visibilidad a través de los blogs tecnológicos como este o las redes sociales. Convertir en referentes a profesionales que vengan de distintos sectores formativos, para poder tener una perspectiva mucho más cercana de los puestos específicos en los que cada ciclo STEM es indispensable.

3. La transversalidad de las STEM o STEAM

La mayoría de las decisiones sobre el avance del mundo implican tecnología, pero, ¿cómo acercarnos al mundo STEM? Una forma de hacerlo es a través de un grado universitario STEM o un grado medio o superior de FP STEM. Pero no sólo desde un campo puramente científico-tecnológico podemos sentarnos en la mesa de decisiones sobre el futuro STEM.

La incipiente digitalización de todos los ámbitos de nuestra vida nos permite hablar de las STEM como una disciplina transversal a la mayoría de las profesiones. A día de hoy, son imprescindibles para entender nuestro mundo y sus problemas. Sobre todo, cuando se necesita tomar decisiones respecto a los ODS, que tienen un gran componente científico-tecnológico.

Precisamente, el desarrollo masivo y acelerado de las STEM necesita algo que lo complemente. Que resuelva las cuestiones éticas, legales, creativas, pedagógicas y sociales detrás del avance tecnológico.

Aquí es donde aparece el concepto de educación STEAM (Science, Technology, Engineering, Art and Mathematics). Desarrolla las competencias de los alumnos de forma más global: la tecnología, la ingeniería y las matemáticas se trabajan juntas, más contextualizadas y en conexión con las artes, la ética, la filosofía y la historia. El objetivo es transmitir el papel fundamental de la tecnología en todas las profesiones e industrias.

Es fundamental empezar a considerar la formación STEM como parte básica de la educación de toda la ciudadanía. Desde pequeños y para todas las edades, independientemente de a qué te quieres dedicar o en qué ámbito trabajas actualmente. La tecnología es una gran lanzadera para ello. Se puede fomentar la formación autodidacta e independiente a través de los recursos online o de iniciativas como la Escuela 42 de Telefónica.

Ya estudies artes, humanidades, derecho o medicina, es muy probable que necesites enfrentarte a retos profesionales con un alto contenido STEM. Es muy enriquecedor que las personas que lideran estos ámbitos cuenten con una perspectiva diversa que aporte otra dimensión a las decisiones que se toman en el mundo STEM.

¿Por qué con la formación no basta?

Cuando hablamos de la educación de una niña, no podemos olvidar que los centros educativos sólo representan el 20%. El otro 80% lo representa la familia y el entorno. Es imprescindible realizar un impacto real durante su infancia y adolescencia para terminar con el sesgo sobre su futuro profesional.

Formar a las familias es uno de los primeros pasos. Contenido online y libre específicamente accesible para los padres. Partiendo de cualquier nivel es necesario poder aprender a usar las herramientas tecnológicas y pedagógicas para jugar con sus hijas. Transmitir el papel indispensable que tienen las familias en impulsar el talento femenino STEM. Jugar con los kits de robótica, ir a la semana de la ciencia, participar en los eventos tecnológicos de los colegios para que conozcan a otras niñas con los mismos intereses, etc.

Crear ecosistemas STEM locales donde las estudiantes puedan acercarse a jugar y desarrollar su curiosidad por las STEM. Lugares donde estar en contacto con referentes que sean profesionales STEM. No todas las niñas tienen una mujer en su entorno con la que poder sentirse identificadas, pero es una forma muy eficaz de terminar con la infravaloración de las capacidades técnicas y tecnológicas inherentes al sesgo social que, sin querer, recibimos desde pequeñas.

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Para recorrer este camino, es imprescindible la colaboración público-privada para la elaboración de talleres, como los que se hacen en la Fundación Telefónica, en el Madrid Innovation Lab (MIL) del Ayuntamiento de Madrid o en STEM 4 Girls en la UC3M.

Pero, además, hacer un llamamiento al talento femenino que ya está trabajando en el mundo laboral STEM, para compartir experiencia y mentorizar a las niñas. Darles una voz y convertirlas en referentes. Crear redes de apoyo a mujeres y niñas como Women In Tech Spain.

Conclusión

Sin nosotras hay un sesgo en cada nuevo diseño. Creo que nadie ha sido capaz de transmitirnos cómo de imprescindible es nuestra opinión para el diseño del futuro tecnológico y eso es lo que falta en la mente de todas las nuevas generaciones de niñas. Y está en nuestras manos intentar cambiarlo.

Si queremos avanzar hacia un panorama de equidad en el mundo STEM, debemos realizar un impacto real en la sociedad a través de una educación STEM, consciente de la brecha de género y transversal al resto de disciplinas.

Desdibujar los roles profesionales desde la educación primaria y secundaria e impulsar las iniciativas de las empresas tecnológicas que se quieran colaborar con sector educativo. Siempre dotando de las herramientas necesarias para que los padres, madres y profesores aprendan a usarlas y se encarguen de potenciar el interés de sus hijas y alumnas.

Informar mucho mejor (y desde mucho antes) sobre los ciclos de Formación Profesional y las ocupaciones a las que abren la puerta. Pero sobre todo, impulsar que las chicas quieran elegir los ciclos técnicos y tecnológicos antes que otras ramas con salidas profesionales más desprotegidas o inestables.

Aprovechar el impulso del avance tecnológico para cerrar la brecha de género. Corregir sesgos implícitos en la sociedad con el diseño de los algoritmos en lugar de perpetuarlos. Crear fuentes de formación STEM libre y redes de mentorización de mujeres y niñas en el ámbito STEM. Difundir el amplio rango de actividades y eventos STEM de cada región de forma directa y accesible.

Está en nuestra mano decidir cómo va a ser el futuro STEM, solo tenemos que querer formar parte de él. Trabajemos por una mesa de decisiones diversa para conseguir tecnología más humana y un mundo mejor para todos.

Imagen de cabecera de Brand Factory.

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