La unión de estas compañías para contruir puntos de carga eléctricos dará un gran impulso al mercado.
Uno de los asuntos más candentes en lo que respecta a los coches eléctricos es su sistema de carga, y más allá de la velocidad, los conectores y la ubicación de los puntos de carga. Con las gasolineras tradicionales se logró que cualquier vehículo pudiera repostar, situación ahora mismo impensable en coches eléctricos. Por ejemplo, si tuvieras un Golf eléctrico, sería técnicamente imposible cargarlo en un supercargador de Tesla, al igual que no puedes cargar un Tesla en los cargadores que algunas ciudades han instalado.
El fin de este sinsentido puede llegar de la mano del grupo VAG, Ford, BMW y Daimler, que han llegado a un acuerdo para construir 400 estaciones de carga ultra rápida a lo largo de las autovías del continente. Esto significa ofrecer 350 kW por estación, frente a, por ejemplo, los 120 kW que ofrecen los supercargadores de Tesla, en lo que en media hora se recarga la batería para una autonomía de 270 kilómetros. Desde la alianza aseguran que su solución será considerablemente más rápida.
La construcción comenzará, según lo planeado, en 2017, y las obras finalizarían en 2020, dos años antes del que ya se espera incluso que los coches eléctricos valgan menos que los de gasolina, 2022. Para un año antes, 2019, la Unión Europea quiere que cada nuevo hogar sea equipado con un cargador en el momento de su construcción.
El puerto de carga, gran aspecto de polémica, será el Sistema de Carga Combinada (CCS), un estándar que ya es usado por todas las compañías que se han unido junto a Fiat-Chrysler y Hyundai. En ese sentido, la medida se ha tomado para expandir más rápidamente el mercado de los coches eléctricos, algo que Volkswagen ya está haciendo por su cuenta, con el anuncio de que varios de sus vehículos tendrán a partir de 2017 variantes totalmente eléctricas como el e-Golf.
En Estados Unidos ha sido el gobierno quien ha apoyado públicamente la construcción de puntos de carga eléctrica, con 4.500 millones en garantías para las compañías que accedan al proceso. En ambos casos se puede ver que instalar más puntos de carga eléctricos es la máxima prioridad para quien está interesado en el tema, ya que la no disponibilidad de estos en las ciudades y principales vías es lo que impide a mucha gente dar el paso. Pero sin duda, al igual que microUSB o USB-C, un estándar de conector de carga debe imponerse.
