Este año la ciencia planea traernos toda clase de noticias que coparán las portadas de la mayoría de diarios del mundo. Medicina, física o astronomía son los ámbitos donde el progreso estará más presente en 2017.
Cada año la ciencia nos asombra con noticias y descubrimientos que proyectan un futuro más esperanzador del que imaginamos. Cuestiones como la medicina, la física y la astronomía forman el grueso de estas publicaciones, que consiguen llegar a nuestros oídos a la misma velocidad del sonido. Aunque en algunos casos se trate de avances más moderados, siempre deben suponer un motivo para alegrarse, ya que como Marie Curie explicaba, el camino del progreso no es ni rápido ni fácil.
La vacuna contra el zika
Tal y como revela la revista Science, el hallazgo de una vacuna contra el zika podría estar lista este mismo año. De momento, en pruebas realizadas con monos, algunas sustancias han resultado ser efectivas contra el virus, causante de fiebre y microcefalia en bebés. Tres de estas vacunas han pasado a la etapa de ensayos clínicos en personas, en las que se investiga su tolerancia en seres humanos y cuyos resultados se obtendrán en los próximos meses. No obstante, existen una serie de obstáculos. Los anticuerpos de la inyección podrían interaccionar con el virus del dengue, de modo que se generaría una variante aún más dañina de esta enfermedad. Además, debido a la propagación del zika en América del Sur, un porcentaje notable de afectados ha superado la enfermedad desarrollando inmunidad hacia el virus, lo que supone un riesgo a la hora de detectar los beneficios de la vacuna.
Aunque la OMS anunciará el pasado noviembre que ya no se teme una pandemia global, la epidemia sigue activa en algunas regiones y se espera el nacimiento de muchos bebés con anomalías para este año. Afortunadamente, 2017 será el año en el que las vacunas en desarrollo demuestren su efectividad.
El noveno planeta
Uno de los grandes retos científicos de 2017 es el descubrimiento del Planeta X, cuya hipotética existencia fue anunciada por astrónomos estadounidenses el año pasado a raíz de los efectos gravitacionales detectados sobre los cuerpos del cinturón de Kuiper. Aunque todavía no haya sido observado directamente por ningún ser humano, se estima que este planeta tenga una masa diez veces mayor que la Tierra y que gire alrededor del Sol en una órbita 20 veces mayor a la de Neptuno. Según han sugerido algunas investigaciones, la posición actual del cuerpo podría deberse a un empujón gravitacional de Júpiter en el pasado y su presencia explicaría un ligero movimiento del Sistema Solar.
Programa espacial de China
En los próximos meses, China envirará su quinta misión a la Luna con la que espera recoger hasta dos kilogramos de superficie lunar para estudiar los orígenes del satélite. “Chang´e-5” es el nombre de esta misión que continuará con el ambicioso programa espacial chino, después del anuncio de su intención de llegar a Marte en 2020. Se trata de la primera vez que China traerá material lunar, misión que no se repetía desde la soviética Luna 24 de 1976. Gracias a sus últimas publicaciones, China ha alcanzado la segunda posición como potencia científica mundial, aunque la transparencia de su agencia espacial se mantiene aún por detrás de la NASA y la ESA. No obstante, confiamos en poder seguir de manera continuada el progreso de “Chang´e-5”.
Ondas gravitacionales
Tras anunciarse el año pasado la detección de dos señales procedentes de la colisión de agujeros negros en el observatorio LIGO de Estados Unidos, parece muy probable que durante 2017 se detecten ondas gravitacionales por tercera vez. Las deformaciones del espacio-tiempo se observarán en el futuro con mucha mayor frecuencia, abriendo así la puerta a una nueva forma de observar el Universo, que ayudará a comprender los misterios de los agujeros negros y el Big Bang. Sin duda, este año exigirá mucha atención del trabajo realizado en el CERN.
Estudios sobre microbioma
Microbioma es el nombre atribuido al enorme conjunto de virus, bacterias y hongos que habitan en los intestinos de las personas, del cual solo un tercio es común en los seres humanos. Las investigaciones analizan su efecto en el desarrollo del cerebro y la aparición de distintas enfermedades como el cáncer. Afortunadamente, las técnicas de lectura de las secuencias de genes son cada vez más baratas y avanzadas, por lo que se prevé que en 2017 salgan a la luz muchos estudios sobre el impacto del microbioma en la salud. En este sentido, el Proyecto Microbioma Humano, realizado en Estados Unidos, pretende alcanzar grandes resultados encontrando correlaciones entre los cambios en el microbioma y las enfermedades.