chaquetas inteligentes para conectar en bici

Chaquetas inteligentes para conectar en bici

Se puede pedalear sin dejar de estar conectado. Entre las modas y tendencias que irán imponiéndose en otoño, habrá que incluir también las chaquetas inteligentes que permiten contestar llamadas o subir el volumen de la música sin perder el ritmo de pedaleo.

Con un wearable instalado en la manga de la chaqueta, dotado de sus correspondientes sensores y conectado a un smartphone, la práctica del deporte ya no es incompatible con el uso del móvil.

La información que recibe el ciclista se transmite a través del audio para que no exista riesgo por distracción, y las opciones que ofrece este nuevo invento son realmente variadas: cambiar músicas, crear nuevas rutas o responder todo tipo de llamadas sin necesidad de soltar el manillar. Como diría un vendedor de coches, las prestaciones de esta prenda inteligente son tantas como las necesidades que cualquiera pueda imaginar, mientras recupera el buen estado de forma tras las vacaciones.

Las chaquetas inteligentes desarrolladas por Levi´s y Google, que podrían estar en el mercado este mismo otoño, permitirán también controlar el volumen del terminal, son solo rozar una parte de la tela, así como encender y apagar luces o recibir direcciones. La chaqueta en cuestión se llama “Commuter” y está conectada con el móvil mediante la tecnología denominada “Jacquard”.

https://www.youtube.com/watch?v=yJ-lcdMfziw
Fuente: Levi´s

El tejido “interactive denim” ideado por los fabricantes permite crear superficies, a través de gestos y movimientos que son interpretados por el dispositivo móvil que llevamos con nosotros. En una palabra, que teléfono y chaqueta se comunican de forma inalámbrica.

Pero ésta sólo es una de las muchas aplicaciones que ya están saliendo al mercado de la “ropa inteligente”. Hay otras muchas innovaciones que se están introduciendo en lo que podríamos llamar ya como nuevo territorio del sector textil, un mercado que podría alcanzar el próximo año los 135 millones de euros, sin contar en esta prospección de mercado, lógicamente, la producción de los wearables que no van incorporados a la vestimenta. No obstante, tampoco está de más recordar que el año pasado –datos de la consultora IDC, publicados por “La Vanguardia”– se vendieron alrededor de 102 millones de wearables en todo el mundo, un 25% más que el año anterior, un millón de ellos en nuestro país.

Aunque todavía esté en fase experimental, jóvenes investigadores valencianos han diseñado una chaqueta inteligente que mejorará la seguridad de los ciclistas. Se llama “MaIOT” y transforma los movimientos que hace el ciclista con los brazos en señales luminosas a su espalda. Puede incorporar sensores que en tiempo real –a través del móvil –te informan de tu ubicación, de las condiciones ambientales que te esperan durante el recorrido, así como la detección de caídas, con aviso a emergencias. Este proyecto, ganador del concurso Pequeños Grandes Inventos, convocado por la Universidad Politécnica de Valencia, abre nuevas vías en la búsqueda de mayor seguridad para los aficionados al deporte del pedal.

Pero esto no ha hecho más que empezar. La consultora Infoholic Research, en un reciente estudio, estima que el mercado mundial de ropa inteligente superará los 2.900 millones de dólares en 2022, con un crecimiento anual del 117%. Estamos hablando de ropa que aporta servicios adicionales. Aunque partíamos de cifras muy pequeñas, propias de un mercado que acababa de iniciar su singladura, en los últimos años el sector registró crecimientos superiores al 300%. España, según IDC, ocupa el noveno puesto en este mercado que encabezan China, Estados Unidos y el Reino Unido.

Sobre el autor

RELACIONADOS