Proteger tu hogar con un sistema de seguridad es una genial idea para evitar sustos o pérdidas de aquellos objetos de valor, tanto económico como sentimental. Hoy en día, además, hay multitud de opciones que pueden adaptarse a la perfección al tipo de casa o necesidades que busca un usuario. Desde cámaras que funcionan a través del móvil, o hasta sistemas de alarmas completos que, incluso, tienen conexión con una central y avisan directamente a la policía en caso de que esta detecte algún intruso. Pero, ¿cómo funcionan estos sistemas de seguridad?
Vamos a hacer hincapié, en concreto, en dos tipos de sistemas de seguridad. Uno de ellos es el de las alarmas mediante conexión central. Este se contrata a través de compañías de terceros, e incluyen los dispositivos de protección, como el sistema de alarmas y una pequeña central para activar, desactivar o gestionar los sensores y mecanismos que permiten detectar si alguien ha entrado al hogar sin permiso.
El segundo sistema es el de alarmas y dispositivos de seguridad inteligentes que no tienen ningún tipo de conexión central con compañías de terceros, sino que es el propietario del hogar quien revisa, por ejemplo, las cámaras a través de su smartphone para, posteriormente, tomar las medidas necesarias, como avisar a la policía.
Alarmas con conexión central
Hay muchas compañías que ofrecen sistemas de alarmas con conexión central. Constan, principalmente, de uno o varios sensores que se ubican en puntos estratégicos del hogar. Entre ellos; entradas, zonas con ventanas, lugares céntricos como el salón o habitaciones donde suele haber objetos personales y de valor, como dormitorios. Su funcionamiento, además, es muy sencillo.
Los sensores, cuando están activados, son capaces de detectar cualquier tipo de movimiento, y estos envían una alerta a la central de la compañía de alarmas. Son los operarios de la compañía quienes recopilan información relevante sobre lo sucedido, que varía dependiendo de lo completo que sea el sistema. Por ejemplo, si este, además de sensores, incluye cámaras, los operarios pueden obtener una vista previa de lo que están capturando para comprobar si, por ejemplo, se trata de un intruso o es solo uno de los miembros del hogar, quienes han olvidado de desactivar la alarma al llegar a casa.
Una vez recopilado todo lo necesario, el personal de la central puede ponerse en contacto con los propietarios para informarles de lo sucedido y confirmar el allanamiento. Una vez confirmado, es el propio personal quien se encarga de avisar a la policía o al cuerpo de seguridad que corresponda y evitar el robo.
Un detalle interesante es que compañías como Telefónica ofrecen en sus servicios sistemas de protección en el hogar mediante una cuota mensual y con diferentes opciones para que el sistema se ajuste a cada tipo de hogar.
Cámaras de seguridad inteligentes
Las cámaras de seguridad tienen sus ventajas y desventajas respecto a las alarmas con conexión central. Son, principalmente, más económicas, pues hay multitud de opciones disponibles, con diferentes funciones, calidad de imagen, etc. También permiten no depender de intermediaros. De este modo, es el propietario quien puede revisar lo que están captando las cámaras en ese momento. Esto, no obstante, tiene un inconveniente, y es que es el propietario quien tiene que actuar y, por tanto, contactar con la policía si alguien entra en su casa.
Por otro lado, las cámaras de seguridad inteligentes permiten realizar algunas funciones que los sistemas de seguridad tradicionales no incluyen. Por ejemplo, son capaces de detectar si el movimiento es de un animal, un vehículo o una persona que reside en el hogar y, de este modo, no enviar una alerta al propietario. Puede, además, detectar si los miembros del hogar entran o salen de casa para poder activar un modo de seguridad que notifica de cualquier tipo de movimiento.
¿Qué opción es mejor?
Tanto las alarmas con conexión central como las cámaras de seguridad inteligente son una muy buena opción para proteger tu hogar, y escoger entre un sistema u otro depende de las necesidades de cada usuario. Para una segunda residencia, por ejemplo, tal vez sea una mejor opción disponer de una alarma de conexión central. También para aquellos hogares donde los propietarios pasan mucho tiempo fuera de casa.
Si por el contrario, no pasas mucho tiempo fuera de casa y prefieres controlar en todo momento las diferentes zonas del hogar, la mejor opción es adquirir cámaras de seguridad inteligente. Por supuesto, también puedes combinar ambos sistemas.