Mira Modi, de solo 11 años, ha puesto un negocio para vender contraseñas generadas con el método Diceware a través de una página web.
Siempre sorprende que un adolescente destaque mucho por encima del resto de sus compañeros en algo. Cuando además lo hace iniciando una actividad que puede dar beneficios económicos o ser considerada un negocio llama aún más la atención. Es el caso de Mira Modi, una chica de 11 años que se ha lanzado a ofrecer servicios de cifrado a través de Internet. En concreto vende contraseñas, generadas por ella con el método Diceware.
En este caso también sorprende la actividad. Vender una contraseña que ha sido generada de un método que podría calificarse como artesanal implica que quien la ha creado la conoce. Esto no ha impedido a Modi poner en marcha una página web sencilla y empezar a vender estas contraseñas.
El reclamo es atractivo. Lo primero que se lee en la web de Modi es una pulla al usuario. “Venga, admítelo, tus contraseñas pueden ser mejores. En lugar de ‘12345’ o ‘password, tus contraseñas pueden ser más largas, más sólidas y más únicas”. Esta chica propone a sus potenciales clientes ofrecerle una clave de seguridad avanzada, pero sencilla de recordar.
Ella misma la genera empleando un dado y una lista de palabras. Las vende por dos dólares cada una y no las almacena en su ordenador ni en ningún otro lugar. Estas contraseñas generadas con Diceware las escribe a mano en un papel y este lo envía por correo postal al destinatario. Señala en su web que esta es la forma de envío más segura, pues una carta mandada por ‘US Postal Mail’ no la puede abrir el gobierno a no ser que tenga una orden de búsqueda.
Criptografía a temprana edad
Modi empezó en el mundo de la criptografía de la mano de su madre, Julia Angwin, una periodista especializada en privacidad y autora del libro Dragnet Nation. Precisamente fue al escribir este libro cuando la periodista introdujo a su hija en cuestiones de cifrado. Una de las partes del texto habla del método Diceware parar generar contraseñas y para ilustrarlo pidió a Modi que probara a crear claves únicas.
La chica aprendió el funcionamiento del método y su utilidad. Le gustó y ha encontrado la manera de seguir practicándolo y obtener algunos ingresos. El Diceware fue inventado en 1995 por Arnold Reinhold, quien creó una extensa lista de palabras (en inglés, después ha sido creado un equivalente en otros idiomas) a las que se llega lanzando dados. Dependiendo de la combinación de números que se saque en el dado se elegirá uno u otro término, repitiendo la operación varias veces para generar una contraseña.
Imágenes: guidedbycthulhu y dicewarepasswords.com
