Aunque todos accedemos a Internet vía WiFi, detrás de esos puntos de conexión inalámbricos suele haber un router que accede a la red de redes a través de fibra óptica. Gracias a esta tecnología, hoy en día tenemos conexiones de entre 100 MB y 1 GB de velocidad. Ahora, además, la fibra óptica puede llegar a todos los rincones de nuestros hogares gracias a su modalidad FTTR.
Las conexiones de fibra óptica de las que disfrutamos en la actualidad reciben el nombre de FTTH, acrónimo que significa Fiber To The Home, es decir, fibra hasta la vivienda. Esto significa que la conexión desde las centralitas de nuestro proveedor a nuestro hogar se realiza mediante cableado de fibra óptica. A máxima velocidad y sin pérdida de datos. A partir de ahí, esa fibra óptica se conecta al router y éste sirve el ancho de banda entre todos los dispositivos que conectes al mismo.
El siguiente paso natural, para satisfacer la demanda de Internet de alta velocidad, era extender esa fibra a toda la vivienda. Especialmente para quienes no obtienen buena cobertura WiFi o tienen puntos ciegos en sus casas cuando cuentan con varias plantas o una extensión considerable. Existen soluciones intermedias, como cableado Ethernet o soluciones PLC. Pero también existe una solución que emplea fibra óptica. La fibra FTTR, Fiter to The Room: fibra hasta la habitación.
Cobertura y máxima velocidad en toda tu casa gracias a la fibra FTTR
Mínima latencia y máxima velocidad. Son dos requisitos que deben cumplir las conexiones para satisfacer servicios cada vez más habituales. Como el gaming online, videollamadas grupales, actividades de realidad virtual o conectar decenas de dispositivos de manera simultánea. Por regla general, nuestro router cumple con creces con lo que le pedimos. Gracias a la red de fibra óptica, por un lado, y a la conectividad inalámbrica vía WiFi que integra el propio router.
Pero pueden darse situaciones especiales. Como que nuestra vivienda tenga varias plantas, nos conectemos a Internet desde un punto muy alejado del router, haya elementos en nuestro hogar que interfieran en la conexión WiFi. O se produzcan interferencias al haber muchas conexiones simultáneas pared con pared. En estos casos, es posible mejorar la cobertura mediante repetidores o amplificadores de señal.
Pero la fibra FTTR soluciona este problema mediante cableado de punta a punta de tu vivienda. El mismo cableado, o muy similar, al que emplea la propia red de telecomunicaciones que nos brinda Internet. Pero en esta ocasión, mediante un hilo muy fino, prácticamente invisible, que facilita su instalación en cualquier habitación o estancia. Sin que afecte a nivel estético. Además, con esta tecnología, la conexión llega a todas partes. Y con la máxima velocidad disponible, incluso mayor que la que proporciona el WiFi, reduciendo la latencia al mínimo y sin pérdida de datos o de cobertura.
Y hay más ventajas. Además de la alta velocidad, en especial en conexiones de 600 Mbps o 1 Gbps, la baja latencia y la estabilidad y buena cobertura, la fibra FTTR aumenta la cantidad de dispositivos que podemos conectar. Esto es ideal para hogares inteligentes que ya cuentan con sistemas de vigilancia, sensores de temperatura o iluminación inteligente. Más allá de los dispositivos ya habituales como teléfonos, tabletas, ordenadores, televisores, dispositivos de juego, realidad virtual, etc.
Cablear tu vivienda, pero sin que se vea
Aunque las conexiones inalámbricas son más cómodas, muchos expertos coinciden en recomendar la conexión por cable si necesitamos aprovechar todo el ancho de banda. Pero no siempre es posible, bien porque requiere de metros y metros de cable, realizar agujeros en paredes, suelos o techos, etc. El uso de fibra FTTR simplifica el cableado de la vivienda para aprovechar al máximo conexiones de 300 Mbps o más. En especial, en aquellos rincones a los que no llega toda la señal WiFi de nuestro router. O de los amplificadores que tengamos instalados.
El despliegue de fibra FTTR permite cablear tu hogar sin afectar a nivel de obra o estética. Llevar la banda ancha a todas las habitaciones y estancias con velocidades de 300 Mbps o más en lugares en los que vas a lidiar con videollamadas, realidad virtual, juego online, streaming de imagen y/o sonido y un largo etcétera. Algo cada vez más habitual. Y que se resiente cuando la cobertura WiFi no puede alcanzar sus mejores cifras por mil motivos que hemos mencionado antes.
En parte, la fibra FTTR traslada al hogar, al ámbito doméstico, las exigencias técnicas que emplean las empresas, el ámbito profesional. Y lo hace sin necesidad de levantar parqué, agujerear paredes o alterar el orden que ya tenemos en nuestra casa. Por otro lado, trasladar una tecnología profesional al ámbito doméstico es algo que tiene mucho sentido en un contexto en el que cada vez se estila más el teletrabajo o servicios telemáticos como la teleasistencia o la seguridad inteligente.
