En pocos días tendrá lugar la edición anual del Mobile World Congress de Barcelona, el evento mundial más relevante sobre la tecnología móvil para impulsar el sector de las tecnologías de la información y la comunicación. A medida que se acerca la fecha los fabricantes calientan motores mostrando algunas características y novedades sobre los futuros terminales que se lanzarán al mercado durante los próximos meses. Para esta ocasión, la compañía Taiwanesa HTC ha presentado hoy su nuevo buque insignia, el HTC One.
El HTC One, anteriormente conocido como HTC M7, pretende convertirse en un duro competidor dentro de la nueva generación de terminales de gama alta gracias a las nuevas prestaciones que ofrece y a un diseño renovado que dista mucho de lo que nos tiene acostumbrado la firma taiwanesa. Uno de los puntos fuertes del nuevo terminal es su pantalla SoLux Full HD de 4.7 pulgadas, con resolución de 469 ppp, que ofrece algunas mejoras en cuanto a los ángulos de visión y la reproducción de color con respecto al modelo actual.
La simpleza en el diseño del nuevo HTC destaca por sus nuevas proporciones sin bordes laterales y con el detalle del diseño de pantalla deslizando por los laterales del dispositivo. La imagen filtrada muestra un diseño renovado con un grosor de 9.3 milímetros , en cuyos laterales incorpora los conectores de microSIM, microUSB y el controlador de volumen. El terminal cuenta con la interfaz Sense 5.0 para Android que incorpora nuevos iconos, pantalla de bloqueo y widgets de mayor tamaño que aportan un look más moderno al terminal. Además cuenta con un procesador Snapdragon 600 de Qualcomm con 4 núcleos Krait 300 a 1.7Ghz, 2Gb de RAM, en versión de 32 o 64Gb de almacenamiento interno. Otra de las novedades que incorpora este terminal es el paso evolutivo de los megapíxeles a los ultrapíxeles de la cámara trasera a través de la tecnología de superposición de 3 lentes de resolución similar, en este caso 4.3 mpx, para sumar 13 en total y así mejorar la calidad de imagen y el color en el producto final.
Es cierto que HTC no está precisamente en uno de sus mejores momentos. La supremacía de Samsung en el mercado de Android y la dura competencia de otros fabricantes han dejado a la compañía taiwanesa en una difícil situación. A pesar del lanzamiento del año pasado del One S y One X parece que los terminales de Android no lograron convencer al público en general, dentro de un mercado dominado por Samsung y su gama Galaxy. Las pérdidas rebasaron el 22% con una caída interanual del 79% de beneficio neto, una de las más grandes de la compañía.
Esto explica la expectación generada por la firma en su apuesta por el nuevo HTC One y la decisión de programar la presentación oficial de este terminal fuera del MWC, con el fin de generar un mayor impacto mediático,lejos del aluvión de novedades que se presentarán durante el evento.
No obstant, la compañía cuenta con la experiencia suficiente para seguir recuperando cuota de mercado y diversificando su estrategia de negocio con el lanzamiento conjunto de otros terminales, ya que no apuesta todo a una carta como hace BlackBerry con su BlackBerry OS o Apple con su iOS. Precisamente en la diversidad puede estar su punto fuerte para volver a la senda de crecimiento.
