El plan de Francia en IA, entre 2019 y 2022, se apoyará en una cantidad de 1.500 millones de euros para impulsar el sector. El objetivo es que se generen nuevas propuestas, capaces de atraer investigadores de prestigio al país.
Francia no se quiere quedar atrás en materia de inteligencia artificial. La prueba es el compromiso que el presidente francés, Emmanuel Macron, ha adquirido con su anuncio en el centro educativo y de investigación Collège de France, en París. Desde 2019 hasta 2022, el I+D en inteligencia artificial recibirá una inversión de 1.500 millones de euros.
El objetivo es que se generen nuevas propuestas, capaces de atraer investigadores de prestigio al país. Por ahora, compañías como Samsung, Fujitsu, Google o Microsoft ya tienen proyectos para abrir centros de investigación en IA en Francia. Uno de los propósitos del plan de Francia es crear centros de formación que sirvan para equilibrar los puestos de trabajo que la inteligencia artificial eliminará.
El plan contempla doblar el salario a los investigadores jóvenes y triplicar el número de estudiantes especializados en IA. El gobierno francés ha definido una estrategia centrada en cuatro sectores: defensa, salud, transporte y medio ambiente. El ejecutivo también ha dejado patente su intención de regular la naciente industria con normas adicionales.
Este impulso está destinado a competir con los grandes gigantes en inteligencia artificial. Se trata de Estados Unidos y China. El país norteamericano lleva la delantera de momento, aunque las expectativas del gobierno chino apuntan alto. Para 2020 las autoridades del país asiático quieren que el mercado de IA sea de 22.000 millones de dólares. El volumen previsto para 2030 es de 150.000 millones, una auténtica enormidad.
China ha dado pasos para situarse, en un futuro a medio plazo, como líder en inteligencia artificial. La disputa por esta posición está claro que es cosa de dos. Países como Francia se encuentran a otro nivel, pero sus esfuerzos también contribuyen a posicionarlos en el mercado global.
Francia no es el único país, fuera de los dos grandes, que se preocupa de la inteligencia artificial. Japón se ha marcado los Juegos Olímpicos de Tokio, en 2020, como una fecha para aumentar la robotización. En aeropuertos y hoteles está previsto que tareas informativas y de servicios básicos las hagan robots. A esto hay que sumar la iniciativa de Emiratos Árabes Unidos. El país del Golfo Pérsico ha sido el primero que ha dado el paso de nombrar a un ministro de Inteligencia Artificial. Una cartera desde luego desacostumbrada. Hasta ahora.
Imágenes: Daniel_Hache, geraltinteligencia artificial