El país nipón está decidido a ser el líder en lo que respecta a los coches de hidrógeno. La industria y el gobierno se han puesto a trabajar en ello. Así, en 2020 espera tener listas 160 hidrogeneras en todo Japón. Serán 320 en 2025, y 720 en 2030.
El motor de combustión tiene sus días contados. Al menos el esplendor de sus días sí parece próximo a expirar. Todo apunta a que su sucesor en el ámbito de la movilidad será el motor eléctrico y las baterías de ion-litio. Pero no todo el mundo piensa que esto será así. En Japón sueñan con los coches de hidrógeno.
El país del Sol Naciente es uno de los que más énfasis ha puesto en el hidrógeno como combustible para alimentar los motores de los automóviles del futuro. Esto no quiere decir que vaya a decantarse por este tipo de vehículos en vez de por los eléctricos. Ambos pueden convivir, pero el gobierno de Japón impulsa con denodado ahínco esta opción.
En un simposio internacional sobre el cambio climático y la descarbonización, el investigador de la Universidad de Waseda Yasuhiro Daisho dio una visión general del escenario que se plantea en Japón sobre los coches de hidrógeno. El científico recordó que el país ha sufrido tres crisis por culpa del petróleo en los últimos 45 años. Esto debería bastar como acicate para empujarlo hacia otro tipo de movilidad.
Daisho asegura que la industria automovilística en Japón se moverá hacia los coches de hidrógeno, aunque no exclusivamente. Así pues, habrá también eléctricos y se mejorará la eficiencia del motor de combustión interna.
El síntoma definitivo de que los coches de hidrógeno tienen apoyo es la postura del gobierno. No solo pretende favorecer a la industria para que los desarrolle sino que también fomentará la construcción de las infraestructuras. Las estaciones de carga de hidrógeno son fundamentales para la adopción y Japón quiere apostar fuerte aquí. Para 2020 espera tener listas 160 hidrogeneras en todo el país. Serán 320 en 2025, y 720 en 2030.
En cuanto a los coches de hidrógeno, las cifras no son menos ambiciosas. En 2020 el país quiere que haya 40.000 vehículos de este tipo circulando en sus carreteras. Para 2025 se esperan 200.000, y para 2030, 800.000.
En principio puede parecer que son pocas estaciones de hidrógeno para 800.000 coches, pero debería ser así. En España, si tomamos los datos de Urban Science y Aniacam, para 2016 había más de 30 millones de vehículos. En cuanto a las gasolineras, al cierre de 2015 había algo menos de 11.000, según la Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos. La proporción sería de más de 2.700 vehículos por gasolinera.
Los planes de Japón para los coches de hidrógeno arrojan una proporción más equilibrada. Serían algo más de 1.100 vehículos por cada hidrogenera. El problema está en la capilaridad, que las gasolineras ya tienen y de la que carece cualquier infraestructura nueva.
Imágenes: Joseph Brent y Toyota