Revolución verde en India

La Revolución verde que salvó a India de la hambruna en los 60

A lo largo de los años 60 tuvo lugar la llamada Revolución verde en India, una serie de avances agrícolas que salvaron al país de la hambruna.

En el año 1961 en India vivían en torno a 450 millones de personas. La población estaba creciendo rápido tras la independencia del país y los métodos agrícolas que se empleaban entonces comenzaban a quedarse cortos. El gigante asiático se encontraba en una situación crítica, al borde de una hambruna de grandes proporciones. En este momento, desde el Ministerio de Agricultura se decidió apostar por una nueva moda del sector agrícola que estaba calando en otros países.

En aquel momento era ministro de Agricultura C. Subramaniam. Él y su secretario de Agricultura, B. Sivaraman, se convencieron de que había que llevar las nuevas técnicas agrícolas a India para luchar contra sus problemas de alimentación. Invitaron a Norman Borlaug al país con la intención de pedirle consejo.

Borlaug era un ingeniero agrónomo que llevaba trabajando en nuevas variedades de la planta del trigo desde hacía más de dos décadas. En los años 40 había introducido en México un tipo de variedad enana, resistente a enfermedades y al viento, que había resultado en un asombroso incremento de la producción. Después se vería que en dos décadas México triplicó la producción de trigo convirtiéndose en exportador de este alimento.

A partir de la visita de Borlaug el gobierno indio comenzó a importar semillas de la nueva variedad de trigo, que estaba demostrando una productividad muy superior a las acostumbradas. Y el Ministerio de Agricultura se lanzó a las pruebas. Se escogió el estado de Punjab, en el norte del país, por ser una región donde abundaba el agua y tradicionalmente ofrecía condiciones favorables para la agricultura.

Poco a poco el programa se fue expandiendo. Pronto se pasó del trigo al alimento básico de Asia, el arroz. El país importó una variedad semienana que había desarrollado el Instituto Internacional de Investigación del Arroz, en Filipinas. A finales de los años 60 se comprobó que este nuevo arroz producía cinco toneladas por hectárea sin fertilizantes y casi 10 toneladas usando todos los medios al alcance. Estas cifras suponían multiplicar la producción por diez.

Las claves de la Revolución verde en India –y en todo el mundo, en general– fueron sobre todo tres. La primera es la creación de un nuevo tipo de variedades, más productivas que las anteriores. El segundo punto importante fue el uso de productos químicos para favorecer los cultivos. Se emplearon fertilizantes para que el suelo tuviera más nutrientes, mientras que se desarrollaron nuevos pesticidas y herbicidas, que sirvieron para acabar con plagas y enfermedades en las plantas.

Revolución verde en India

Otro de los factores que contribuyeron a la Revolución verde fue el uso de un mismo terreno para más de una cosecha al año, con lo que el suelo estaba siempre produciendo. Así se reducían los costes de producción y esto también estimuló un abaratamiento de los alimentos, que se sumaba al que ya existe en un mercado cuando la oferta aumenta.

En los años 60, las cosechas de arroz en India eran de aproximadamente dos toneladas por hectárea. Si se echa la vista hacia delante, en 1990, se había alcanzado el triple de esta producción: seis toneladas por hectárea. La Revolución Verde en India fue capaz de resolver parte de los problemas alimentarios del país y ha sustentado su enorme crecimiento poblacional de las últimas décadas.

No todos son luces. La Revolución verde también ha recibido críticas, particularmente las que se refieren al uso masivo de fertilizantes y pesticidas, que perjudican al medio ambiente, aumentando la contaminación y erosionando los suelos. La distribución del agua es otro de los problemas generados. Los recursos naturales no daban abasto y hubo que redistribuirlos artificialmente.

Imágenes: IFPRI-IMAGES, II

RELACIONADOS