“Yo antes recogía catálogos. Pero eso era hace mucho, muchísimo tiempo, como hace al menos dos años. De hecho, hasta llegué a tener una ‘ruta de recogida’, que solía empezar por el súper de mi barrio y terminar al poco tiempo en el contenedor de reciclaje de papel. Ahora miro las ofertas por internet, o me bajo la aplicación de la marca. Muchas veces lo hago porque hay promociones o descuentos, aunque la mayor parte de las veces lo hago porque me es más cómodo (y ecológico). Desde el smartphone, la tablet o el pc me bajo las apps que me interesan y así me entero sólo de aquello que realmente me importa.”
El mundo de la comunicación está cambiando, de eso no hay duda. La aparición de nuevas tecnologías (a un ritmo cada vez mayor) unido a los cambios en el comportamiento de los consumidores nos hace asistir a una era en la que las empresas tienen que buscar también nuevas formas de relacionarse con sus clientes. Por ello son cada vez más las compañías que lanzan aplicaciones corporativas, lúdicas e incluso las denominadas health apps aunque su negocio poco tenga que ver con estas actividades. La razón es que hay que estar ahí. Y no es de extrañar su preocupación, ya que en España existen 12 millones de usuarios activos de apps y 2,7 millones de descargas diarias según el último estudio publicado por The App Date.
El uso cada vez más generalizado de dispositivos móviles como los smartphones o tablets, junto con el enorme crecimiento del mercado de aplicaciones, propicia la posibilidad para muchas empresas de comunicarse con un target de clientes a los que es imposible llegar de otro modo. La tendencia es clara: ya no va tanta gente a la tienda a recoger el catálogo para mirar las ofertas de turno, nos fijemos en la industria que nos fijemos. ¿A cuánta gente de 20 años habéis visto últimamente entrar a una tienda a recoger una revista? Es una tradición que se está perdiendo, y no sólo entre los más jóvenes.
Si unimos todas estas razones a la apuesta de Movistar por la apertura y consolidación de nuevos canales de comunicación con el cliente, no nos puede extrañar el lanzamiento de La Tienda, una app (de momento sólo disponible en iOS para iPad), que recopila la información disponible en la tradicional revista de papel disponible en sus puntos de venta, pero que contiene sustanciales diferencias debido a la adaptación propia del soporte: contenidos multimedia, interactividad, localizador de tiendas…
Con la aplicación La Tienda de Movistar el principal objetivo es abrir y consolidar el canal de las apps como una nueva vía de relación con el cliente. El reto ahora es hacer llegar esta comunicación a través de otros dispositivos como los smartphones (el formato ya es distinto —el tamaño de la pantalla sí que importa—), por lo que la meta es adaptar correctamente la comunicación a estos dispositivos de la mejor forma posible, entendiendo que el usuario de una tablet, aunque sea la misma persona que el usuario de smarpthone, siempre es distinto en función del soporte.
Si no eres fan de los catálogos en papel, siempre podrás crear en la tablet una carpeta del tipo “Tiendas” o “Catálogos” —la app con el catálogo de Ikea tampoco suele faltar aquí—. Aun así, si eres un nostálgico, siempre podrás seguir recogiendo catálogos de tienda en tienda, a la antigua usanza. Una cosa no quita la otra. Hay tradiciones que hay conservar.