Un movimiento que parece que tiene que ver con la creación de un área de Nube e Inteligencia Artificial. Y es que, Microsoft abraza la realidad, dejando a Windows en el lugar que le corresponde, sin división propia y con menos protagonismo que antaño.
Cuando creíamos que los profundos cambios que inició Satya Nadella en su toma de posesión del cargo de CEO de Microsoft en 2014 habían finalizado, la compañía de Redmond ha anunciado que la división de Windows se estructurá en dos, y que Terry Madson, que ha sido encargado de las divisiones de Dispositivos y Windows en los últimos cinco años, sale de la empresa.
Un gran movimiento que parece que tiene que ver con la creación de un área de Nube e Inteligencia Artificial, que tendrá mucha relevancia en la nueva era de la computación cloud. El equipo no partirá de cero, y es que recibirá muchos empleados de los antiguos equipos de trabajo de Windows e Investigación. Azure, el negocio de servidores, es de los más rentables de Microsoft, y tiene sentido que se potencien sus capacidades. El líder aquí será Scott Guthrie.
La otra división que se crea con este movimiento es la de Experiencias y Dispositivos, que será liderada por Rajesh Jha. Llevará todo lo relacionado con el hardware, que para la Microsoft de hoy en día significa la familia de ordenadores y tabletas Surface, las consolas Xbox y las gafas de realidad aumentada HoloLens. Estas últimas prometen mucho, pero lo cierto es que parece que la realidad aumentada de Windows va a estar más encaminada a vender con soluciones más económicas. Panos Panay, estrella de las últimas presentaciones de producto, será el encargado de la sección.
Por su parte, Windows continúa siendo una división dentro de Experiencias y Dispositivos, y dependerá de otro grande de Microsoft, Joe Belfiore. Sin embargo, como hemos dicho, pierde peso en número de trabajadores y ahora también desarrollará aplicaciones como Microsoft Edge, que ya está en plataformas como iOS y Android. Satya Nadella afirma en su comunicado que «el futuro de Windows será brillante mientras se siga innovando en nuevos escenarios y dispositivos».
Sin embargo, la reestructuración muestra a una compañía cuyo fuerte ya no será el sistema operativo universal, y que se adapta a una era en la que no se puede permitir volver a perder frente a Google y a otros actores importantes en inteligencia artificial y el tratado de datos como Facebook.
