Científicos de la Universitat Pompeu Fabra crean modelos computacionales con los que realizar diagnóstico prenatal de posibles complicaciones al nacer.
El diagnóstico prenatal agrupa a una serie de técnicas en medicina que tienen como objetivo detectar enfermedades en el feto antes de que la mujer embarazada dé a luz. De este modo, los estudios como las ecografías, los análisis bioquímicos, la biopsia o la amniocentesis nos ayudan a conocer si puede haber problemas médicos inesperados. El ejemplo más conocido probablemente sea el de la trisomía del cromosoma 21, que sirve como señal de que el feto padece Síndrome de Down.
El avance de la ciencia está permitiendo el desarrollo de técnicas innovadoras que nos ayudan a detectar patologías fetales antes de que el bebé nazca. La última ha sido posible gracias a un trabajo de científicos de la Universitat Pompeu Fabra, que ha posibilitado la creación de modelos computacionales sobre la circulación sanguínea en los fetos, mientras permanecen en el útero materno. ¿Pero cuál es el objetivo?
El sistema circulatorio es el primero en ponerse en marcha en el embrión humano, con el fin de hacer llegar nutrientes y oxígeno necesarios para su crecimiento y desarrollo, y también de recoger las sustancias de desecho. En algunos casos, por desgracia, la circulación sanguínea no funciona correctamente y esto puede implicar graves problemas al nacer. Para conocerlos es preciso recurrir al diagnóstico prenatal, y este nuevo trabajo de la UPF avanza en esta materia.
Un nuevo estudio, liderado por el científico Eduard Gratacós, ha permitido desarrollar modelos computacionales sobre la circulación fetal, con el objetivo de «estimar propiedades hemodinámicas y vasculares, la resistencia y elasticidad de las diferentes arterias y órganos, en el cerebro y en la placenta por cada paciente». De esta forma, la simulación y el diagnóstico prenatal permiten a los médicos saber el estado de salud del feto, ya que según algunas investigaciones, «existe una asociación entre la restricción de crecimiento intrauterino y la remodelación cardiovascular».
En otras palabras, aquellos bebés que presentan un bajo peso al nacer pueden sufrir problemas cardiovasculares, ya que estos signos de remodelación ocurren tanto a nivel de órgano, como vascular, celular y subcelular. Estos cambios pueden ser apreciados con técnicas que se usan actualmente, como la ecografía Doppler, aunque en ocasiones puede que no sean suficientes para conocer con todo detalle posibles problemas cardiovasculares en los fetos.
La llegada de esta nueva metodología de diagnóstico prenatal, basada en la simulación computacional, permite conocer qué fetos podrían sufrir complicaciones al nacer o incluso de manera posterior. El trabajo, publicado en la revista Placenta, muestra la importancia de las técnicas computacionales para cuidar la salud de los recién nacidos.
Imágenes | Kenny Louise (Wikimedia), Universitat Pompeu Fabra
