El FiLIP es un reloj que puede hacer y recibir llamadas, así como emitir su localización en base a GPS. Se trata de una especie de móvil para niños pequeños.
El creador de FiLIP, Sten Kirkbak, perdió a su hijo en medio de un centro comercial cuando éste contaba con tres años. Pasaron 30 minutos de angustia hasta que lo encontró y tras vivir esta experiencia se propuso inventar algo que evitara trances de este tipo a cualquier padre. Así es como ha nacido esta especie de móvil para niños, aunque más bien es un reloj con capacidades telefónicas. Pero que nadie piense en un smartwatch, el dispositivo está limitado para servir exclusivamente a su propósito: localizar al pequeño.
Y es que FiLIP está diseñado específicamente para niños de entre cuatro y ocho años. Sus colores llamativos y una interfaz simple, perfectamente comprensible, buscan ser aceptados por los más pequeños. Por supuesto el dispositivo ofrece la resistencia necesaria para cualquier objeto que vaya a estar en manos de criaturas con estas edades, incluida la tolerancia al agua.
En esencia, este móvil para niños permite hacer y recibir llamadas de cinco números de teléfono, que tienen que estar guardados en la agenda del dispositivo. Cualquier número que intente contactar sin estar almacenado en esta agenda no podrá hacerlo. Para llamar, el niño tiene que seleccionar el contacto con el botón verde (sólo hay dos botones para simplificar las cosas) y pulsar el rojo para iniciar la llamada.
Los cinco números de teléfono escogidos pueden enviar mensajes de hasta 24 caracteres al dispositivo FiLIP, aunque el niño no podrá responder de la misma forma. El reloj conecta con una aplicación móvil, y a través de ella los padres pueden conocer en todo momento la localización de su hijo (con un registro de las últimas 48 horas), contactar con él o ver si se encuentra en una zona segura (que previamente habrán sido determinadas por los padres desde la aplicación).
El botón rojo también puede servir como botón de pánico. Si el niño lo mantiene pulsado durante tres segundos, FiLIP emite una señal a un call center, donde un operador intentará contactar con los cinco números que aparecen, para después entablar una línea de comunicación entre éstos y el dispositivo. Pero el niño no puede contactar directamente con los servicios de emergencia.
FiLIP cuesta 200 dólares y está a la venta en Estados Unidos, por el momento. Este móvil para niños pretende ser la alternativa a comprar un smartphone a los más pequeños, una opción en la que más de uno habrá pensado a estas alturas.