Con sede en Madrid, este nuevo centro de alto rendimiento pone a España a la cabeza de esta nueva modalidad deportiva. Toda la estancia está pensada para mejorar y ayudar al entrenamiento de los jugadores y elevar así a los jugadores de Movistar Riders a otro nivel.
Los Movistar Riders siguen pisando fuerte. Bueno, pisando no, aplastando y haciendo leyenda en lo que a deportes electrónicos se refiere. La última novedad es el estreno de su nueva sede en Madrid, el Movistar Esports Center situado en el Matadero de la capital. Este nuevo espacio es el centro de alto rendimiento para deportes electrónicos más innovador de Europa. Y es que no podía ser menos, ya que los Movistar Riders ya cuentan con siete equipos profesionales de deportes electrónicos, donde destacan los equipos de League of Legends, CSGO o Call of Duty. Además, ya participa en las competiciones más importantes de esports y tiene más de 60 profesionales en su equipo.
El centro está pensado como lo que conocemos como una ciudad deportiva al uso de cualquier equipo deportivo. En él, además, se podrán celebrar competiciones y realizar transmisiones de las mismas. El Movistar Esports Center cuenta con salas habilitadas para el entrenamiento de los jugadores, así como un vestuario donde los jugadores podrán sentirse componentes de un gran club deportivo. Movistar Riders nació en enero como una de las apuestas más fuertes de esports que se hacía en nuestro país, y ya se ha convertido en uno de los principales clubes a nivel nacional. Ese día se hacía historia, ya que Telefónica anunció los tres pilares básicos en los que se centraría esta nueva iniciativa. Un acuerdo con ESL, la mayor plataforma de esports, una oferta multicanal en la mayor televisión privada de nuestro país y la creación de un equipo con su propio centro deportivo.
Pues bien, con el Movistar Esports Center se cumplen todos los objetivos que Telefónica se había propuesto alcanzar con su equipo de deportes electrónicos.
Movistar Esports Center, la utopía hecha realidad
¿Quién se imaginaba hace unos años que jugar a videojuegos podría convertirse en un deporte profesional? Vivir de algo que para muchos era su vía de escape de la realidad. Esa utopía ha pasado a ser un hecho. Y, por si fuera poco, el nivel profesional de este deporte es mucho mayor de lo que podría pensarse hace tiempo.
El Movistar Esports Center da cuenta de todo esto. Un espacio de más de 1000 m2 donde jugadores y entrenadores podrán desarrollar al máximo sus actividades de manera más profesional.
Los jugadores están sometidos a duras rutinas, tanto físicas como mentales, para poder dar el cien por cien en sus partidas. Por ello, a parte de las salas de entrenamiento de las que hablábamos antes, el centro contará con un espacio habilitado para el cuidado alimenticio de los deportistas, siempre supervisado por el equipo médico.
Todo tipo de actividades se desarrollarán dentro del Movistar Esports Center. Charlas formativas por parte de jugadores y entrenadores, visitas guiadas para los seguidores de este deporte y celebraciones internas promovidas por el Club.
En total, el centro tiene los siguientes espacios:
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Arena: un anfiteatro desde el que se retransmitirán los torneos y además será el punto de encuentro entre fans y deportistas.
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Training Room: el núcleo del Movistar Esports Center. Cuatro salas de entrenamiento para los equipos de Movistar Riders, en este caso, los dedicados a LOL y Overwatch, donde podrán hacer bootcams. Estas salas también podrán ser utilizadas por otros equipos que vengan a Madrid a competir.
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La Cantina: la zona restaurante donde los menús serán realizados por el equipo médico para mantener el rendimiento físico siempre a tope.
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Oficinas: el lugar donde trabajarán los más de 60 profesionales que el equipo tiene a su disposición. Desde el equipo directivo hasta el equipo de psicólogos.
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Media Content Room: el lugar donde se realizará toda la creación audiovisual. La imagen en este deporte es un pilar fundamental, por lo que hay que saber retransmitir el mejor contenido a través de los diferentes canales de divulgación.
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TV Control Room: la sala de realización con un equipo propio y las últimas tecnologías.
Los esports se convierten en el nuevo deporte de masas
Podemos asegurar que los esports están siguiendo el modelo competitivo del fútbol. Ciudades deportivas, clubes de alto nivel, derechos de antena y jugadores estrella como Lee Shang-hyeok, que tiene un fichaje de dos millones de euros.
Los esports cuentan con unos ingresos de 600 millones de euros, dejando de ser un juego de niños para convertirse en una cosa más seria. Entrar en este deporte se ha convertido en algo fundamental por parte de las empresas de nuestro país. “El reto para nosotros como club está en conseguir que nuestro equipo juegue un papel activo en el crecimiento de los esports en España, por ello, el centro nace con la vocación de convertirse en un espacio de referencia para el desarrollo y difusión de los deportes electrónicos. En este sentido, el club cuenta con un área de contenidos y con unas instalaciones que nos permiten crear programas y piezas para difundir tanto a través de la televisión como de la Red”, explicaba al respecto Fernando Piquer, CEO de Movistar Riders.
Gracias a los acuerdos de patrocino con Honor o Drift, los Movistar Riders disponen de las mejores tecnologías para desarrollar su actividad. Eso sí, el club respeta por completo los estudios o actividades paralelas de los jugadores para que su deporte favorito no interceda con su educación.
“Los esports están experimentando un crecimiento espectacular, y a esto ahora se une la entrada del mobile gaming en la escena competitiva. Honor, en su apuesta por el público más joven e innovador, apoya firmemente un proyecto de la envergadura del Movistar Esports Center”, sentenciaba al respecto Javier Palacios, director de Honor España.
Parece que, aunque no todo el mundo esté de acuerdo, los esports son el futuro. De ser un simple juego de niños, esta actividad se ha convertido en uno de los deportes más mayoritarios del mundo haciéndonos ver que este futuro será muy diferente de lo que conocemos.