Los científicos William G. Kaelin Jr, Gregg L. Semenza, y Sir Peter J. Ratcliffe reciben el máximo galardón en el campo de la medicina.
Comienza los Premios Nobel 2019 donde conoceremos a los galardonados en los campos de Medicina, Física, Química, Literatura y Paz.
El primer galardón del año ha sido el Premio Nobel de Medicina, que se ha otorgado a los científicos estadounidenses William G. Kaelin Jr y Gregg L. Semenza, y al cientifico británico, Sir Peter J. Ratcliffe, por sus descubrimientos sobre cómo las células perciben y se adaptan a la disponibilidad del oxígeno.
A priori puede parecer obvio que las células necesiten oxígeno para vivir, pero se desconocía cómo las células eran capaces de adaptarse a entornos con diferentes niveles de oxígeno, tal como lo han explicado en el Instituto Karolinska de Suecia.
¿En qué consiste la investigación?
La detección de oxígenos es un pilar fundamental para muchas enfermedades. Y la investigación de Kaelin, Semenza y Ratcliffe tienen una importancia fundamental para crear nuevas estrategias para combatir enfermedades como el cáncer y la anemia, entre otras.
The fundamental importance of oxygen has been understood for centuries, but how cells adapt to changes in oxygen levels has long been unknown. This year’s #NobelPrize awarded work reveals the molecular mechanisms that underlie how cells adapt to variations in oxygen supply. pic.twitter.com/rsPYDH9NQ8
— The Nobel Prize (@NobelPrize) October 7, 2019
Nuevas técnicas para luchar contra el cáncer
Con este galardón demuestra que la entidad sueca se involucra por encontrar nuevas medidas para luchar contra el cáncer.
Como sucedió en el año 2018 cuando se otorgó el reconocimiento a los inmunólogos James P. Allison y a Tasaku Honjo por sus investigaciones basadas en la estimulación del sistema inmune para atacar a las células cancerígenas.
Esta investigación consiste en que nuestro sistema inmunitario es capaz de reconocer como «extrañas» las células tumorales. Para ello, desarrollan sistemas para neutralizar esa amenaza, pero las células tumorales son capaces de frenar el ataque del sistema inmune.
Gracias al descubrimiento por los inmunólogos se desarrollaron nuevos fármacos denominados «balas mágicas», que potencian la respuesta del sistema inmune para hacer frente a las células tumorales.
