El otoño implica la llegada de enfermedades víricas como los resfriados o la gripe. Desde Blogthinkbig.com os recomendamos una serie de alimentos con propiedades antivirales naturales.
La llegada del otoño también implica el comienzo de un fenómeno que se repite cada año: la temida gripe. Los resfriados, la gripe y otras enfermedades infecciosas que afectan a nuestro sistema respiratorio empiezan a pronunciarse en otoño y durante el invierno.
¿Por qué se produce esta enfermedad en esta época del año? Las bajas temperaturas y la variación de humedad propician a que este virus se mantenga en el ambiente con más facilidad. La gripe es esa enfermedad estacional en la que sentimos dolores en las articulaciones y músculos, tenemos fiebre, dolor de cabeza, congestión nasal y tos.
Se transmite a través del contacto directo con otra persona infectada, y aunque la vacuna contra la ‘influenza’ o vacuna antigripal puede protegernos de forma considerable contra esta enfermedad, la verdad es que es difícil aislarse. De hecho, entre 2018 y 2019 hubo un total de 490.000 casos leves y 35.000 requirieron hospitalización.
Un caldo, cebolla o ajo son esenciales
Entonces, ¿qué podemos hacer para evitar contagiarnos este año? La alimentación es un factor muy importante a la hora de protegernos contra la gripe. Existen ciertos alimentos que nos pueden ayudar a fortalecer el sistema inmunitario o aliviar los síntomas. ¿Cuáles son?
No hay nada mejor para combatir el frío que un buen caldo caliente de pollo, verduras o pescado. Si ya estás padeciendo la gripe y están apareciendo los primeros síntomas, un caldo con estos ingredientes te ayudará a aliviar la garganta y la congestión.
La cebolla y el ajo son dos alimentos ricos en propiedades antibacteriales y pueden servir para proteger tu sistema inmunológico y combatir síntomas de la gripe como la tos. Ambos deben comerse crudos porque aportan más beneficios para tu salud. De hecho, la cebolla contiene quercetina, un antiinflamatorio y antibiótico natural. Puedes optar por combinar estos alimentos en ensaladas o exprimiéndolos en las comidas si no te gusta el sabor.
Alimentos ricos en vitaminas y fibra
Sin duda, las verduras contienen nutrientes basados en vitaminas y fibra que son esenciales para evitar resfriados. Las espinacas o la lechuga, por ejemplo, contienen grandes cantidades de vitaminas E y C.
Mantenerse hidratado es fundamental y una buena forma es mediante infusiones de raíces como el jengibre. Un té de jengibre y limón es vital para aliviar dolores de garganta porque tiene propiedades antisépticas y antiinflamatorias.
Para desayunar puedes optar por comer avena pues posee propiedades antioxidantes, y es fuente de polifenoles que pueden ayudar a nuestro sistema inmunológico.
Finalmente otro alimento que puede ser un gran aliado para combatir la gripe es la calabaza. Este tubérculo contiene betacaroteno que refuerza el sistema inmune.
