El mundo de la tecnología también se ve envuelto en ocasiones en la bruma de los rumores, las filtraciones y las especulaciones. A veces es necesario vender tu producto antes incluso de que exista. Para conseguir inversores. En ocasiones, se trata de generar ruido para que hablen de ti. El resultado, que el usuario medio acabe perdido y desconfiando de tanta rumorología, sin nada tangible. Es lo que, al parecer, ocurre con la Web6. O no.
Para poner algo de contexto. Actualmente, disfrutamos de lo que se conoce como Web2 o Web 2.0. Un cúmulo de servicios, productos y comodidades que tenemos a nuestro alcance desde cualquier dispositivo conectado. Una parte importante de Internet que genera millones de dólares. Y desde hace un tiempo, se viene hablando de Web3. Una evolución o revolución de la Web actual, segunda se quiera ver, y que tiene como bases tecnologías como el blockchain.
Mientras se van gestando servicios de lo que será la Web3, como los NFTs, los contratos inteligentes o las criptowallets, Jack Dorsey habló por primera vez de Web5. Bueno, en realidad lo hizo su actual compañía, TBD. Los comentarios del público no se hicieron esperar. ¿Dónde está la Web4? Y entre esos comentarios, entre lo curioso y lo cómico, surgieron dos comentarios relevantes hablando de la Web6. Uno de Justin Sun y otro de Snoop Dog. Así pues, ¿qué sabemos de la Web6?
De la Web3 a la Web5
Pero vayamos por partes. Empecemos por el principio. Todo el mundo hablando de Web3 y surge el concepto de Web5. Surge básicamente de la empresa TBD y de la figura de Jack Dorsey, creador de Twitter y ahora inversor en proyectos de criptomonedas. Para entenderlo, hay que decir que TBD es una subsidiaria de Block, empresa de pagos online creada por el propio Jack Dorsey. No es de extrañar que cuando TBD publicó un mensaje en Twitter hablando por primera vez de Web5, concepto que ahora aparece claramente en su descripción de esta red social, el propio Jack Dorsey comentara ese mensaje.
Así que antes de hablar de la Web6, ¿qué es esa Web5 y por qué se saltan la Web4? En realidad, todo responde al marketing. Una herramienta muy útil pero que en malas manos genera confusión y situaciones como ésta. Web5 es un proyecto que quiere poner en marcha una plataforma web descentralizada. Pero, claro, eso es precisamente lo que pretende ser la Web3. La clave está en quién controla algo que, en principio, se nos quiere vender como algo incontrolable.
Web3 como concepto teórico surge en 2014. El autor es Gavin Wood, cofundador de Ethereum. Se trata de una de las plataformas blockchain más populares. Bajo esta plataforma existe una moneda virtual del mismo nombre y se han creado mundos virtuales y herramientas como los NFTs o los contratos inteligentes, antes mencionados.
Y ahí está la clave del asunto. Una de las claves de la Web3 es que será una web descentralizada. Pero esto choca con que la mayoría de productos y servicios de esa Web3 están basados en una misma plataforma, Ethereum. Viendo la oportunidad, Jack Dorsey, a través de TBD, pensó lanzar su propia alternativa. No ya a Ethereum. Su propia alternativa a la Web3. Y para darle más empaque, llamémosla Web5. Una estrategia de marketing que muchos vivimos en su día cuando se pusieron de moda los reproductores MP3 y, al cabo del tiempo, surgieron sus supuestos sucesores, los reproductores MP4. Eran lo mismo, pero el nombre parecía mejor.
La Web5, otro futuro más para Internet
Bromas aparte, según la presentación publicada por TBD, y difundida por Jack Dorsey, la Web5 pretende ser una versión mejorada de lo que quiere ser la Web3. Y el nombre viene explicado en la tercera diapositiva de la presentación: lo mejor de la Web2 y de la Web3, hacen la Web5. De ahí que nos saltemos la Web4 por el camino.
Aunque seguramente los más expertos verán diferencias, la presentación de la Web5, disponible online para todo el mundo, explica sobre plano conceptos e ideas que básicamente son la base de la Web3. Pero eliminando la plataforma Ethereum de la ecuación. Se habla de identificadores descentralizados, aplicaciones web descentralizadas, seguridad, disponibilidad en cualquier dispositivo, etc.
Por lo demás, mientras la Web3 ya va dando señales de vida en forma de proyectos reales, la Web5 es por ahora un concepto en fase de elaboración. Habrá que esperar para saber si se trata de una estrategia de branding o si realmente aporta algo nuevo a lo que ya está gestando bajo el paraguas de Web3. Sea como fuere, toda mejora tecnológica será bien recibida si aporta una mejor experiencia al usuario. Se llame Web3, Web5 o Web6.
¿Qué hay de la Web6?
Ahora que queda claro que vivimos en la Web2, que está en camino la Web3 y que hay quien trabaja en la Web5, queda hablar de la Web6, que es el tema que da pie a este artículo. Pero era importante hablar del contexto. Solo así podemos entender el por qué de Web6. Concepto del que poca información encontrarás en Internet salvo en medios especializados en el mundo del blockchain y las criptomonedas. Y es que todo apunta a que Web6 no es más que una respuesta sarcástica al proyecto de Web5 de Jack Dorsey y TBD. El tiempo dirá si me equivoco.
Las referencias a Web6 surgen precisamente tras el anuncio de Web5 en junio de este año. Entre los comentarios de Twitter al mensaje de Jack Dorsey podemos encontrar referencias a por qué se han saltado la Web4 y otras preguntas y bromas similares. Algunos comentarios recuerdan algo similar a lo que ocurrió con Windows cuando Microsoft decidió saltar de Windows 8 a Windows 10 para evitar confusiones con Windows 95 y Windows 98. Otros hablan de Web10, Web12, etc.
Pero hace tiempo que Twitter se ha convertido en una plataforma en la que según quién dice qué, ese comentario se convierte en noticia. Es lo que ocurre con Web6, concepto del que hablaron Snoop Dog y Justin Sun. El primero, conocido rapero estadounidense que entre otros negocios e inversiones, tiene su propia colección de NFTs. Por su parte, Justin Sun es un nombre importante en el mundo de las criptomonedas. Principalmente, por haber fundado Tron, una empresa dedicada a los contratos inteligentes.
Leyendo los dos comentarios todo apunta a que Web6 no es más que una broma a raíz del anuncio de Web5. Quién sabe si dentro de unos años estamos hablando realmente de Web6 como algo tangible. Dentro de lo que permite lo digital. Pero por el momento, no hay nada más allá de dos comentarios sarcásticos que se unen a muchos otros. Y que podemos leer a continuación del anuncio de Jack Dorsey. Detrás de Web6 no hay ni presentación, ni una empresa que quiera dedicarse a ello. Simplemente, el humor. Tan necesario hoy en día incluso en ámbitos como el de la tecnología.
