El HDMI 2.0 comienza a establecerse como el formato estándar de los televisores de ultra alta definicióny reproductores multimedia. ¿Qué cambio supone esta actualización?
En la pasada edición de la feria de electrónica de consumo y tecnología más importante de Europa, la IFA 2014, la corporación HDMI Forum cumplió su promesa de presentar el que será el nuevo estándar en la transmisión de señales de alta definición que comenzaría a expandirse en todo el mercado. Así nacía HDMI 2.0, pero hoy en día, a unos 10 meses de su debut, aún quedan muchas dudas de qué cambios supone esta actualización mayor de la interfaz multimedia de alta definición.
Debemos comenzar por entender que las actualizaciones que ha vivido HDMI desde su nacimiento en el año 2002 han sido para proveer a la industria multimedia de lo que necesita. Un ejemplo claro es que hoy en día los llamados televisores 4K de ultra alta definición no son aprovechados al máximo, dado que el cable HDMI que usamos para transmitir la señal de vídeo y audio desde el reproductor multimedia (como un BluRay) al TV no es el más óptimo para su tecnología.
El estándar anterior antes del nacimiento del HDMI 2.0 era el HDMI 1.4, y aunque está capacitado para transmitir vídeo en resolución 4K (es decir, 3840×2160 píxeles), no aprovecha la tasa de refresco máxima que en teoría permiten estas pantallas. En pocas palabras, los cables actuales limitan al televisor.
La era del 4K
Así inició la presión por parte de los fabricantes de televisores y en general de la industria para actualizar el estándar al HDMI 2.0 y este, la verdad, lo cumple a la perfección.
Comenzando por sus capacidades de transmisión de datos, el HDMI 2.0 no está limitado a los 30 cuadros por segundos (fps), sino que puede transmitir vídeo en 4K y a 60 fps, algo que quizás en el día a día al ver películas y series no suponga una gran diferencia, pero en cuanto a los videojuegos y, sobre todo, para el usuario profesional del vídeo, es un deleite para sus ojos.
En general el HDMI 2.0 cuenta con un ancho de banda de hasta 18 Gigabits por segundo, un notable aumento en comparación con los 10.3 Gigabits por segundo máximos que ofrecía la versión anterior. Esto es lo que hace posible no solo la transmisión a 60 fps, sino también da soporte a los formatos panorámicos de pantallas que comienzan a abundar en el mercado de los monitores (pantallas con formato 21:9) y finalmente, aprovechar esos maravillosos 12 bits de color que ofrecen las pantallas más modernas de ultra alta definición.
El audio también ha sido mejorado
Pero no solo el apartado de vídeo ha sido mejorado con la llegada de HDMI 2.0, sino que este nuevo estándar permite reproducir hasta 31 canales de audio con frecuencia de 1536 kHz, una gran mejora en comparación con los apenas 8 canales de audio que permite reproducir el formato actual.
El cambio en este apartado ha sido tan significativo que incluso el gigante de gigantes en la industria del sonido profesional, Dolby, anunció que trabajaría en llevar su formato Dolby Atmos que reproduce audio de 64 canales, al estándar HDMI 2.0, sin perder calidad mínima y en general ofreciendo la mejor calidad de sonido profesional directamente en el centro de entretenimiento de nuestros hogares.
Pero para poder disfrutar de todos estos avances, algunas cosas tienen que cumplirse. La primera gran noticia que acompañó al lanzamiento de HDMI 2.0 es que es compatible con la mayoría de televisores, reproductores multimedia, consolas de videojuegos e incluso cables que ya mismo tenemos en casa; la gran condición es que el fabricante de tu Smart TV y tu reproductor debe actualizar su software para implementar estas grandes ventajas, algo que muchos fabricantes prometieron hacer durante este año 2014.
Son muchas las ventajas claras del nuevo estándar HDMI 2.0, que podemos resumir sencillamente en que nos permite aprovechar realmente el potencial de la nueva tecnología de ultra alta definición en los televisores 4K.