Samsung EGO comenzó en 2006 como una iniciativa paralela a la Mercedes Fashion Week de Madrid para dar a conocer nuevos talentos, no ha sido hasta 2013 cuando se ha consolidado como referente para la moda conectada.
Aunque parezca sacado de una novela futurista, la ropa inteligente que muestra sentimientos o estado de ánimo ya es una realidad. Actualmente en España el referente en cuanto a innovación en este campo es la pasarela madrileña de Samsung EGO. Aunque comenzó en 2006 como una iniciativa paralela a la Mercedes Fashion Week de Madrid para dar a conocer nuevos talentos, no ha sido hasta 2013 cuando se ha consolidado como referente para la moda conectada.
El patrocinio de Samsung desde hace 5 años ha hecho posible casar la moda con la tecnología. La máxima expresión es su premio Samsung EGO Innovation Project, orientado a la investigación en el campo de la moda. En concreto, este premio tiene como objeto becar un proyecto innovador en relación con la tecnología aplicada a la moda en cualquiera de sus facetas.
El mejor exponente de esta tendencia es la última ganadora de este certamen, la española Constanza Más con su proyecto Quantum, que trata de desarrollar una norma de comunicación emocional mediante la luz. Gracias a una aplicación instalada en el móvil, la ropa puede expresar sentimientos previamente seleccionados con patrones preconfigurados y exclusivamente para emociones positivas.
Hasta la fecha, han diseñado ocho prendas, tres para hombre y cinco para mujeres. Todas blancas para poder emitir distintos colores y así reflejar un abanico más grande de emociones. «Las prendas construyen un lenguaje de emociones, es ropa con superpoderes», afirma Constanza Mas, que estudió Ingeniería de Diseño Industrial y se graduó en Diseño de Moda.
La colección Quantum, que así se denomina, está compuesta por camisas, casacas, chalecos, vestidos cortos y pantalones de seda y satén. Para convertirlos en inteligentes se añaden materiales como metacrilato, plástico y aluminio anodizado y se conecta todo con el móvil del propietario para configurar las opciones.
Otras propuestas
Otro ejemplo viene de la firma Zap-Buj, que utiliza materiales de construcción como siliconas y aislamientos e impresiones en 3D para «reconectar el cuerpo humano con su entorno, uniendo moda y arquitectura». Tras realizar juntas el Máster de Arquitectura, Moda y Diseño de la ETSAM, las dos fundadoras de esta firma quieren conseguir materias primas que regulen la temperatura corporal y que a la vez sirvan para aislar la casa.
Una propuesta con más respaldo e inversión es un traje inteligente NFC de Samsung. Elaborado en colaboración con Rogatis, permite al usuario desbloquear su teléfono, intercambiar tarjetas de presentación digitalmente, y configurar los dispositivos en la oficina y en los modos de conducción. Tiene un precio aproximado de 500 dólares, aunque de momento solo está a la venta en Corea.
En definitiva, actualmente disponemos de un sinfín de posibilidades para llevar ropa inteligente, aunque todavía no esté al alcance de todos. Tendremos que esperar un tiempo para poder verlas a la venta en las tiendas o puestos en las calles de nuestras ciudades.