Presentada en Washington D.C., esta idea pretende aligerar el tráfico local gracias a la incorporación de estos vehículos al parque aeronáutico.
Quizá el futuro tal y como lo imaginaba la ciencia ficción en el siglo XX no esté tan lejos como pensamos, o sí, quién sabe. Si atendiéramos a todas las noticias que llegan, en este mundo globalizado, sobre proyectos a realizar en los próximos años, nos daríamos cuenta de que todas estas insinuaciones futuras deben tomarse con cautela.
Aun así, nunca está de más acercarse a leer este tipo de noticias, puesto que auguran unos años venideros muy especiales, tanto a nivel funcional, como a nivel mundial. Todo este tipo de promesas, a la larga, aunque sean muy a la larga, se suelen acabar cumpliendo (la mayoría al menos). Por lo tanto, pese a que pueda parecer que todo este conjunto de informaciones, muchas veces artificiales, sean de vez en cuando vendehúmos, en otras tantas, los sueños de aquellos jóvenes que leían a Isaac Asimov y Philip K. Dick se cumplen.
Uber se prepara para la conquista del aire
En la conferencia Elevate de Uber, recientemente celebrada en Washington D.C., se ha presentado el primer helicóptero-taxi del mercado para trayectos cortos. En este caso, la empresa norteamericana se ha unido a la compañía Jaunt Air Mobility para crear un prototipo de taxi aéreo basado en diseños con mezcla de helicóptero y avión.
La propuesta de Uber pretende conquistar el espacio aéreo de las ciudades con el fin de agilizar el tráfico local. Con una velocidad mayor que la de un helicóptero, se aspira en este caso a concretar de manera más rápida los trayectos cortos que se quieran realizar.
Se espera también que sean ecológicos, puesto que, según Uber, todo vehículo creado a partir de ahora y de uso público debe ser no contaminante.
La propuesta quiere entrar en vigor a partir del año 2023. Lo que aún no ha quedado claro del todo es la manera en que se implementarán dichos taxis aéreos en las ciudades, sobre todo, por las diferencias arquitectónicas entre las calles al uso por donde viajan los coches y las alturas a las que se quiere llegar para evitar las propias calles.
CRÉDITOS DE LA IMAGEN DE PORTADA: Graham Rapier (Business Insider)