No es una frase mía sino del famoso epidemiólogo Miguel Ángel Martínez-González que alerta de los efectos que está teniendo en nuestros hijos y jóvenes, el haber adelantado el uso de los móviles en edades tempranas. Asegura que “ahora mismo tenemos un problema de salud mental en la gente joven sin precedentes”.
El desarrollo tecnológico de los últimos años ha cambiado la forma en que los niños interactúan con el mundo que les rodea. La tecnología móvil en particular se ha convertido en una herramienta de entretenimiento y educación para muchos niños. Sin embargo, cuando se trata de niños con necesidades especiales, como el Síndrome de Down, el uso del móvil debe ser abordado aún con mayor precaución.
Para ponernos en situación, según el estudio de 2023 ‘De Alpha a Zeta, educando a las generaciones digitales’, de la plataforma Qustodio, los jóvenes en España dedican alrededor de cuatro horas diarias a utilizar dispositivos electrónicos. A pesar de que TikTok sigue siendo popular, YouTube ha experimentado un aumento significativo en su uso, registrando un incremento del 20%. En promedio, los niños pasan alrededor de una hora diaria conectados a esta plataforma.
No niego que el uso del móvil puede tener muchos beneficios para todos los niños y en concreto para aquellos que tienen Síndrome de Down. Desde ser una herramienta educativa muy útil -existen numerosas aplicaciones que se han desarrollado específicamente para niños con necesidades especiales-, hasta ser una herramienta de terapia. Muchos niños con Síndrome de Down tienen problemas de atención y concentración. Al utilizar aplicaciones que involucren juegos interactivos, pueden mejorar su capacidad para concentrarse y desarrollar habilidades cognitivas.
Aun así, como padres y educadores tenemos que poner en balance lo bueno que te aporta el uso de estas aplicaciones con los retos que el móvil trae a nuestras vidas.
¿Cuándo le damos el móvil a nuestro hijo con Síndrome de Down?
La pregunta que me haría no es esa sino: ¿para qué necesita mi hijo un móvil? Esta misma cuestión vale perfectamente para cualquier niño, tenga o no Síndrome de Down. Si te paras un momento a pensar, seguramente sea interesante que tenga móvil para estar localizado, tanto por GPS como a toque de llamada. También para que pueda comunicarse con sus amigos. Pero de ahí a darle un móvil con una tecnología como la que tienen los móviles actualmente es un paso de gigantes.
Actualmente hay empresas que ofrecen móviles con lo básico e indispensable para el usuario. También puedes encontrar en el mercado móviles que sólo permite llamadas, estar localizado y usar WhatsApp.
Cuando voy por institutos de España dando sesiones sobre bienestar digital, me sorprende ver la cantidad de alumnos que con 10, 11 y 12 años, están dedicando diariamente tantas horas al móvil. Y no es que estén haciendo un curso sobre programación o aprendiendo a tocar un instrumento. No. Es que están deslizando el dedo para ver vídeos que, sin ser dañinos o inconvenientes, son por lo menos ladrones de tiempo para dedicarlo a actividades que sí que aportan a sus vidas.
La tecnología puede ser una gran herramienta para nosotros y nuestros hijos, pero siendo nosotros la que la controlemos y no al revés. Es primordial que controlemos el tiempo de pantalla: Los padres debemos limitar el tiempo que los niños con Síndrome de Down pasan frente a una pantalla. El tiempo recomendado varía según la edad, pero en general, los niños no deben pasar más de una hora al día frente a una pantalla. Que sea tiempo de calidad, con contenido o aplicaciones que aporten a nuestros hijos.
Utilizar filtros de contenido: Los padres pueden utilizar filtros de contenido para bloquear el acceso a contenido inapropiado o peligroso. Estos filtros pueden ser instalados en los dispositivos móviles y muchos de ellos son gratuitos.
Propón a tus hijos alternativas al uso del móvil: juegos de mesa, puzles, dibujar, deporte, cocinar…hay muchas actividades que pueden realizar nuestros hijos y que les llenará sus vidas.
