Durante décadas los barrios eran los lugares favoritos para pasar el rato con familiares, amigos, vecinos, etc. Una escena típica era ver a las madres en los balcones llamando a sus hijos a voz de grito para ir a casa a comer, después de estar jugando en la calle. Estas anécdotas hace tiempo que quedaron en el pasado, siendo sustituidas por las pantallas y una sensación de individualismo.
La aplicación, ¿Tienes sal?, cuya fundadora es Sonia Alonso, nace con el objetivo de recuperar los vínculos afectivos con aquellas personas con las que compartimos nuestro día a día en el vecindario, fomentar la vida de barrio y poner fin a la soledad no deseada.
De hecho, tal y como asegura Sonia, «la gente tiene ganas de ser solidaria«. Sin ir más lejos, durante la pandemia hubo un incremento de esa solidaridad en los barrios. De un día para otro, la gente se vio aislada en sus casas, donde su único contacto con la normalidad era poder salir a los balcones a charlar con los vecinos.
Por sorprendente que pueda parecer, en ocasiones, hemos desaprendido la naturalidad de hablar con la gente que nos rodea. Hemos dejado de llamar por su nombre al dependiente del supermercado de nuestro barrio y nos hemos olvidado de saludar cuando hemos entrado a un comercio. ¿Tienes sal? surge como herramienta para reconectarnos con el presente y con las personas que nos rodean.
En el transcurso de las últimas décadas, muchas personas han olvidado lo que significa sentirse parte de un barrio y de la gente que forma parte de él. Hace dos años, la pandemia nos obligó a recordar que no estamos solos y que la solidaridad convive en cada uno de nosotros. No cometamos el error de olvidar el pasado. Un pequeño cambio en un vecindario puede ser el comienzo de algo más grande.