Cuesta recordar cómo lo hacíamos antes del smartphone para estar en contacto. Y cuando deja de funcionar lo echamos tanto de menos…
WhatsApp se ha convertido en una de las apps más descargadas y utilizadas en todo el mundo. En abril de 2017, había más de 1.200 millones de personas usando WhatsApp en su smartphone, app de mensajería solo superada por Facebook.
Pero como en muchas cosas, no siempre el mejor es el que se convierte en estándar. WhatsApp es una herramienta muy práctica y fácil de usar, de ahí su éxito y que prácticamente todo el mundo la tenga instalada. Pero muchas veces deja de funcionar o no cumple con lo que necesitamos.
Veamos. ¿Qué nos da WhatsApp? Mensajes de texto, mensajes de voz, conversaciones en grupo, videollamadas, compatibilidad con la mayoría de plataformas móviles, posibilidad de compartir tu posición en el mapa, documentos y fotos, etc.
A continuación vamos a repasar cuáles son, en mi opinión, las mejores alternativas a WhatsApp según el uso que le des.
Obviamente no hay una respuesta definitiva a la pregunta de qué app debería sustituir a WhatsApp, pero dependiendo de para qué la utilizas en tu día a día te decantarás por una u otra alternativa.
WhatsApp con esteroides
Una de las alternativas a WhatsApp que suena con más fuerza es Telegram.
El motivo es que es la app de mensajería móvil más similar, tanto en diseño como en funciones que te ofrece, totalmente gratis.
Chats en grupo, videollamadas, mensajes de texto y audio, compartir documentos y toda clase de archivos, etc.
Pero, además, cuenta con ventajas con respecto a WhatsApp. En primer lugar, cuando se actualiza, no lo hace con pequeños cambios, lo hace con nuevas funciones.
Entre esas funciones adicionales destacan los bots, programas a los que puedes ordenar cosas, como buscar vídeos, imágenes o memes en formato GIF, y más pronto que tarde podrás pedir una pizza o encargar la compra pagando directamente desde Telegram.
Por otro lado, ofrece más elementos de seguridad para cifrar tus conversaciones y su red prácticamente no ha tenido caídas desde sus inicios.
Y, además, puedes usar Telegram desde tablets y computadoras con clientes oficiales, a diferencia de WhatsApp que sólo tiene clientes móviles y una webapp.
Por éstos y otros motivos, Telegram es mi primera respuesta si alguien me pregunta por alternativas a WhatsApp. Veamos más.
Los grupos de padres y madres
Muchos usan WhatsApp para hablar con madres y padres del colegio de sus hijos, profesores, entrenadores o tutores de repaso.
No hace mucho hablé en Blogthinkbig.com de varias herramientas de comunicación para padres, profesores y alumnos.
A diferencia de WhatsApp, están pensadas en el ámbito educativo, por lo que son más prácticas de usar y tienen opciones para evitar molestias o ruido en las conversaciones, como silenciar los mensajes fuera de horario o destacar mensajes importantes.
De las alternativas a WhatsApp educativas destaco Qids, disponible para iOS y Android ya que permite entablar conversaciones con padres, profesores, tutores, etc. con comodidad y evitando el ruido innecesario cuando se habla de temas que no tienen nada que ver con el propósito del grupo.
Permite enviar y recibir vídeo y fotos, destacar mensajes importantes (fechas de excursiones, partidos o exámenes), crear grupos por separado, identificar a cada padre o madre con su hijo para evitar confusiones, silenciar los mensajes fuera de horario, etc.
Para trabajar
Además de para hablar con amigos, familia y con otros padres, otro uso habitual de WhatsApp es el laboral.
Cada vez es más frecuente contar con un grupo de WhatsApp donde hablar con tus compañeros de trabajo y/o con tu jefe.
WhatsApp es barato, ya que no consume tanto como enviar SMS, y te permite estar disponible las 24 horas del día. Pero hay más opciones.
En el ámbito laboral, la opción que crece en adeptos es Slack, una herramienta de mensajería con clientes de escritorio (Windows, Mac) y para plataformas móviles y tablets (iOS, Android).
Slack funciona a partir de equipos. A cada equipo puedes añadir los miembros que sean necesarios, así como grupos o canales de conversación, muy útiles para que cada departamento pueda comunicarse por separado.
Por lo demás, permite intercambiar archivos, destacar mensajes importantes, realizar también conversaciones individuales, buscar mensajes y, en las versiones más recientes, realizar videollamadas y llamadas de audio.
Para hablar con tus clientes
Algo que me sorprendió la primera vez que lo probé fue la posibilidad de que las empresas hablen con sus clientes y viceversa a través de WhatsApp, bien por texto, voz o vídeo y con la posibilidad de enviar documentos.
En este sentido, WhatsApp ya está instalado en el dispositivo del cliente y en el de la persona que le atenderá. No hay que instalar servidores ni tecnología propia.
Pero hay más opciones. Facebook Messenger, por ejemplo, a pesar de pertenecer también a Facebook, dueño de WhatsApp, es cada vez una alternativa más práctica, ya que a diferencia de WhatsApp, se integra mejor con Facebook.
Al igual que WhatsApp, Messenger admite texto, vídeo y audio, conversaciones entre dos personas o en grupo, posibilidad de compartir tu posición en el mapa, etc.
Además, Messenger incluye compatibilidad con los chatbots de Facebook. Al igual que los bots de Telegram, permiten programar acciones por parte del usuario simplemente hablando con el bot.
En un artículo anterior de Blogthinkbig.com, expliqué cómo crear tu propio chatbot, muy útil para responder dudas de tus clientes a través de Messenger sin necesidad de estar presente. Programas los mensajes y el bot responderá a partir de palabras clave.
Otras alternativas a WhatsApp más genéricas
Telegram, Qids, Slack y Facebook Messenger son las cuatro alternativas a WhatsApp que más me convencen, pero hay muchísimas más.
Skype y Hangouts, por ejemplo, pueden ser muy útiles para ámbito personal y profesional, disponibles en computadoras, tablets y smartphones.
LINE es, junto con Telegram, la alternativa más similar, si bien tiene más éxito en Japón que en otros países.
Por su parte, Snapchat sigue siendo una opción a tener en cuenta para el público más joven, pero su crecimiento se ha estancado ante el crecimiento de Instagram como app para compartir imágenes e historias en vídeo.
En definitiva, según qué uso le des a WhatsApp te conviene una u otra herramienta. Además, es importante que tus contactos usen una u otra para decidirte por ella.