La empresa constructora The Boring Company ha creado una conexión entre sus tuneladoras y mandos de videoconsola con el fin de utilizarlas con una mayor precisión.
¿Te imaginas poder jugar a la Xbox en el exterior? ¿Un videojuego sin televisor? Estos conceptos, que pueden sonar a ciencia ficción futura, son la base de operaciones de la empresa creada por Elon Musk The Boring Company para realizar trabajos con maquinaria pesada para la construcción de túneles.
El invento, que ha causado muchos quebraderos de cabeza a la compañía, se utiliza para poder alinear las tuneladoras con su respectivo hueco en el túnel. Al igual que si estuviéramos jugando en nuestra propia casa, el mando de la Xbox se conecta a la máquina y los operarios basculan los engranajes del aparato con los botones. Es decir, una especie de Build Yourself 18 como si fuera una nueva franquicia del mundo del entretenimiento, creada única y exclusivamente para constructoras.
La misión de los trabajadores de The Boring Company es la de realizar un túnel en Los Ángeles, mando de Xbox de por medio, con el fin de ser una vía adicional para poder llegar al Dodger Stadium. Esta maquinaria está prevista también en otros proyectos de la empresa de Elon Musk, como los diseñados para Chicago o Maryland.
El futuro del transporte tiende al subsuelo
Muchos son ya los países que se han interesado en la construcción de túneles de larga longitud bajo tierra. El principal objetivo de la canalización de las carreteras por debajo nuestra es la de contribuir a descongestionar el tráfico urbano de las grandes ciudades.
Más allá de la pretensión de aliviar las megalópolis, los túneles se están pensando también para realizar proyectos relacionados con salvar obstáculos naturales. Tales como superar terrenos montañosos o conectar lugares cercanos separados por el mar.
Uno de los proyectos más ambiciosos respecto al cruce marítimo es el planteado en Noruega para poder situar bajo el nivel del mar la Carretera del Atlántico o Atlanterhavsveien. Una de las más peligrosas del mundo por la magnitud de las olas a su alrededor.
Así pues, parece que el futuro de las comunicaciones terrestres se llevará a cabo bajo tierra, lo que no sabemos todavía es cuándo podrá se podrán ver o disfrutar estos proyectos mastodónticos que aún están en proceso.