La tecnología para todos

Llegó. Lo estábamos esperando con coches voladores pero el futuro apareció con su forma más invisible, de a poco y sin hacer demasiado ruido. La vida de repente nos parece complicadísima o aburrida cuando nos falta alguna tecnología que no imaginábamos hace 7 años. Haces videoconferencias vía internet con personas en casi cualquier lugar del mundo, lanzas un mensaje que es visto por millones de personas, lees foros donde escriben usuarios con los mismos intereses que tú, empiezas a enterarte de las noticias en el mismo momento en que suceden, guardas todas tus fotos y documentos en servidores remotos que no conoces y a los que simplemente llamas «la nube» , haces esas fotos y esos documentos con un pequeño dispositivo, que llevas todo el tiempo y el que te geolocaliza, te despierta, mide tus ciclos de sueño, administra tu música, tus contactos, tus facturas, lo que quieras. Los coches voladores se nos quedan pequeños con todas las ventanas que nos están abriendo las nuevas tecnologías en internet.

El año pasado en todo el mundo se generaron 30.7 exabytes de datos de un total de 10.3 mil millones de conexiones y la previsión según estudios de Cisco es que en 2016 se generen 1.3 zetabytes de datos. Para visualizarlo mejor, el número es un 1 seguido por 21 ceros. Así de vertiginoso.

Internet sigue y seguirá creciendo. Allí donde faltan infraestructuras, el acceso a internet móvil abre oportunidades para que las personas se comuniquen y descubran las posibilidades de la red. Se habla de lo digital como una revolución porque sus cambios son tan potentes que están tirando abajo todos y cada uno de los antiguos modelos a los que se enfrenta: los de las industrias del entretenimiento, los del control de la información, los de los modelos de copyright. Temas como el periodismo, la cultura, el funcionamiento de la democracia, la legitimidad de las instituciones pasan a estar en el centro del debate. Pero ninguna sociedad puede funcionar si no se construye en común. Se hace necesario que todos tengan voz y para tener voz en internet es necesario tener conocimiento.

En un mundo que está cambiando día a día, donde viejos esquemas son derribados mucho antes de que logremos saber cuáles son los nuevos, tenemos una inmensa oportunidad que no debe ser desperdiciada: la de participar todos en el futuro que queremos. La tecnología sigue avanzando, si le damos la mano podremos mostrarle el camino. Porque sólo así ese futuro que hace pequeño al de los coches voladores tendrá sentido.

Foto: darkmatter

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