Un estado de India se ha propuesto llevar a cabo el mayor experimento en renta básica universal conocido hasta ahora. Participarán más de 600.000 personas.
El estado de Skkim, en la parte septentrional de India, se sienta en las faldas del Himalaya. Su territorio es pequeño en comparación con otros estados mayúsculos del país. Su población se corresponde con su extensión. Poco más de 610.000 habitantes residen allí.
Pero sus cifras impresionan. Precisamente por su tamaño manejable, el gobierno local ha conseguido méritos difíciles en otras partes de India. El 98% de la población está alfabetizada y solo hay un 8% de habitantes que viven por debajo del umbral de la pobreza. La media en el país de este colectivo asciende al 30%.
De ahí que el gobierno de Skkim se permita experimentos arriesgados. El último en el que se embarcará es la aplicación de una renta básica universal para sus ciudadanos. Se trata de una medida por la que algunas voces potentes en Silicon Valley han abogado. Lo han hecho como una forma de garantizar ingresos para una parte de la población en el futuro. Porque este futuro estará dominado por la automatización y una gran cantidad de puestos de trabajo ya no serán necesarios.
Esta forma de pensar ha sido difundida en los últimos años por personalidades como Elon Musk y Mark Zuckerberg. Mientras que otros exitosos fundadores de grandes compañías han apoyado la idea, como Richard Branson.
La renta básica universal que quiere organizar el gobierno de Skkim tiene menos pretensiones. Pero supone un paso adelante como no se ha dado anteriormente. Ha habido experimentos en una parte de Canadá y con una parte mínima de la población de Finlandia. Ambos se han detenido. En este caso se trata de nutrir a más de 610.000 personas con este tipo de ingresos, percibido a cambio de nada. Es el mayor experimento de su clase hasta la fecha.
Un estado pionero
El gobierno local de Skkim pretende desplegar el plan de renta básica universal a partir de 2022. Para ello hablará con expertos en la cuestión, con el fin de tomar un camino más informado.
No es la primera vez que este pequeño estado indio toma la iniciativa en cuestiones de dudosa aceptación social. En 1998 fue de los primeros lugares en el mundo en suprimir las bolsas de plástico. Ofrece vivienda de protección oficial para sus ciudadanos y ha eliminado el uso de pesticidas y fertilizantes, que tan decisivos han sido en India desde hace décadas.
La región se puede considerar una punta de lanza del país, que pugna por sobresalir en ciertas áreas de carácter tecnológico. La instalación de energía renovable o el esfuerzo por la digitalización del Estado son signos de la estrategia que el gobierno nacional ha puesto en marcha unos años atrás.
Imágenes: Nick Kenrick. (mostly off until February.. India), AdamCohn