Flybrix es una empresa americana que vende drones, pero sus productos tienen una peculiaridad: se venden con las piezas sueltas, sin montar, para que sea el mismo cliente quien lo haga. Su objetivo es fomentar el contacto del público con la robótica.
Los drones suelen tener un tamaño pequeño, pero su fabricación no es tarea fácil. Al menos, para las personas que no están familiarizadas con la tecnología y con procesos técnicos. Lo habitual, por comodidad del cliente, es que se vendan ya preparados para funcionar.
Flybrix es una empresa americana que hace una apuesta novedosa en este sentido: vende paquetes de drones sin montar, para que seas tú el encargado de construir tu propio dron. A partir de unas instrucciones sencillas, accesibles incluso para gente que no tiene conocimiento previo, puedes montar todos los componentes necesarios para que funcione.
El proceso -aseguran en su página web- es muy rápido. Tanto que, en caso de que el dron se rompa al chocarse con una pared u otro obstáculo -situación bastante probable-, se puede rearmar sin que lleve demasiado tiempo.
Dirigido a todo el que quiera experimentar y aprender
Unas condiciones geniales, sin duda, para jugar y experimentar con el dron. Pues ésta es una de las metas principales de la compañía, que anima a tantear el producto e incluso a explorar distintas formas, como varias versiones de helicóptero.
No obstante, estas diferentes sugerencias no son las únicas posibilidades de acabado. Al estar compuesto de piezas de Lego, desde Flybrix anuncian que los usuarios pueden ampliar el armazón del dron con más bloques de juguete, a su gusto y preferencia. E incluso, cabe la opción de incorporar más motores. ¿Dónde está el límite? Lo dejan a la imaginación y habilidad de cada uno.
En su página web podemos leer las siguientes ideas que sintetizan bien la filosofía de este proyecto: “Jugar es la mejor forma de aprender, no importa lo que sepas. Los experimentos de prueba y error son la clave para la resolución creativa de los problemas. Aprender sobre los drones debe ser seguro y accesible. El desarrollo del código abierto, en última instancia, conduce a mejores productos”.
Por esta razón, los colegios son un lugar idóneo para su aplicación. Así lo expresan desde Flybrix, indicando que sus productos ya se utilizan en más de 500 centros en Estados Unidos. Una buena opción para las materias de Tecnología, con la que las nuevas generaciones pueden descubrir la robótica, así como desarrollar capacidades tan importantes como la creatividad.
En innovación constante
Otra de las características interesantes de sus productos es que se pueden dirigir desde el teléfono móvil. Después de construir tu propio dron es factible pilotarlo desde una app, aunque también lo es adquirir un mando para hacerlo si prefieres el movimiento de estos controles.
Puedes adquirir los paquetes en su página web desde 150 dólares, donde también publican información útil y noticias divertidas de sus avances y experimentos. Ya van por la cuarta versión de software y por la quinta de hardware.
Asimismo, invitan a los usuarios a que compartan sus impresiones y sugerencias, pues están investigando. Puedes hacerlo en este apartado.