Como cada año desde 2015, el primer lunes de octubre celebramos el Día de la Educación Financiera y, desde Wayra, queremos aportar nuestro granito de arena contándoos toda la innovación que la tecnología y las startups nos ofrecen para contribuir a nuestra formación en finanzas personales.
¿Qué entendemos por educación financiera?
La educación financiera se define como el conjunto de conocimientos, habilidades, actitudes y comportamientos que nos permiten tomar decisiones inteligentes con nuestro dinero y, en última instancia, garantizar nuestro bienestar financiero. Gestionar nuestras fuentes de ingresos, nuestros gastos, los ahorros, decidir dónde invertimos, qué préstamos adquirimos, a qué impuestos nos enfrentamos, qué seguros tomar o cómo proteger nuestro dinero son los ingredientes que dan forma a nuestras finanzas personales y para las que, en la mayoría de los casos, tenemos que formarnos por nuestra cuenta.
Educación financiera en España y en el mundo
Según el estudio mundial llevado a cabo por Standard & Poor’s – en el que se entrevistó a más de 150.000 adultos de más de 15 años, de 148 países – el nivel de educación financiera se ve influido por la geografía, el género, la edad, ocupación, estado civil, nivel de educación e ingresos.
El estudio puso de manifiesto que la educación financiera es mayor entre las personas acomodadas, con una buena educación y que hacen uso de servicios financieros. La mayor desigualdad se encuentra en las personas con menos ingresos y en las mujeres, con un índice menor de cultura financiera que los hombres. A nivel geográfico, los países del centro y norte de Europa junto con Canadá, USA y Australia tienen el mayor nivel de cultura financiera del mundo. En España, solo el 49% de los entrevistados superó la prueba con éxito, dejando en evidencia que la mitad de los españoles no tiene suficientes conocimientos de economía familiar.
Como curiosidad, los países mejor posicionados en el ranking incluyen la educación financiera en el currículo escolar, típicamente en educación secundaria.
Educación para la resiliencia financiera en tiempos de crisis
Según los expertos, los programas de educación financiera en el lugar de trabajo y las iniciativas que promuevan la educación financiera en los hogares son clave en un entorno económico adverso como el actual (de crisis energética, aumento de la inflación y de los tipos de interés) puesto que el nivel de educación en finanzas se correlaciona fuertemente con la resiliencia financiera de las familias.
Más allá de la crisis actual, son muchos los factores que influyen en la necesidad de mejorar nuestra educación financiera. Por un lado, el sistema financiero se ha transformado a lo largo de los últimos años con foco en la digitalización de los servicios financieros y los cambios asociados al reemplazo generacional:
- La digitalización de la banca, que es ya un hecho a nivel global, trae en consecuencia la desintermediación por el uso de Internet y las apps móviles, pero una gran parte de la población no está preparada para tomar decisiones sobre sus ahorros o sus inversiones sin la ayuda de un consultor especializado.
- Por otro lado, los gobiernos han fomentado el acceso a los servicios financieros digitales, para favorecer la inclusión de la población en el sistema financiero y fomentar la transparencia, pero para aquellos que carecen de los conocimientos digitales y financieros necesarios, esto puede resultar en un endeudamiento mayor, el impago de hipotecas o la insolvencia.
- Y, en mayor o menor medida, las principales economías están transfiriendo la responsabilidad de planificar el bienestar económico tras la jubilación de los gobiernos y las empresas hacia los particulares, cuestión muy relevante dado que el próximo año empiezan a retirarse los primeros trabajadores de la generación del baby boom, un colectivo con un gran peso en la pirámide poblacional.
En el corto plazo, estamos viviendo un auténtico boom de nuevos productos financieros, con una letra pequeña compleja, se multiplican las alternativas de inversión y, por si fuera poco, nos hemos visto envueltos en el mundo de las criptomonedas, con una sensación de fomo apabullante durante todo el año pasado hacia algo que no hemos terminado de entender.
Todos estos factores desembocan en la necesidad de reforzar nuestra educación financiera para tomar el control de nuestras finanzas y poder gestionar nuestro dinero de manera informada y responsable.
Y aquí es donde llegan las buenas noticias, porque la tecnología democratiza el acceso a contenido especializado, nos acerca a personas referentes a través de nuevos canales como TikTok, facilita el acceso a soluciones de inversión adecuadas a nuestra capacidad de ahorro y todo personalizado según nuestras características y necesidades. Con una buena educación financiera podremos responder a cualquier reto con determinación.
Veamos algunos ejemplos con las soluciones de la siguiente selección de startups.
Balio, educación financiera online sin tabúes
Dicen los chicos de Balio que tu dinero se merece un plan. La startup barcelonesa Balio ofrece una plataforma de formación online en la que los mayores expertos en finanzas e inversiones del ecosistema español ofrecen cursos y webinars super asequibles sobre finanzas personales, inversión, criptomonedas, inmuebles, diversificación de ingresos o emprendimiento. Todo en un entorno de comunidad en el que desnudarse, financieramente hablando, para optimizar tus finanzas y hacer crecer tus ahorros a largo plazo.
Payflow, educación financiera para empleados
Payflow es una startup del porfolio de Wayra en Barcelona cuyo moto es trabajar por el bienestar financiero del empleado. Aunque su propuesta de valor principal es su solución de salario bajo demanda, que posibilita que el empleado pueda cobrar en cualquier día del mes la parte proporcional de su sueldo sin tener que esperar al día de paga, también incluye una plataforma de e-learning interactiva para educación financiera y funcionalidades de gestión del gasto y el ahorro, constituyendo una solución integral de bienestar financiero para el trabajador.
Your Juno, adiós a la brecha de género en educación financiera
La startup londinense Your Juno tiene como misión luchar contra la brecha de género en educación financiera para que mujeres y personas no-binarias puedan enfrentarse a sus finanzas personales con la cabeza bien alta. Además de ofrecer micro-lecciones con conocimientos básicos sobre finanzas personales, posibilita un espacio de comunidad en el que compartir con libertad, preguntar o responder cualquier duda relacionada con asuntos de dinero.
Zogo, la app de Learn2Earn para conectar con la Generación Z
La startup Zogo nace en EE.UU. con el propósito de revolucionar la educación financiera para la Generación Z con una app de Learn2Earn que, por otro lado, acerca a las marcas financieras a la población más joven.
Zogo paga a sus usuarios por completar micro-lecciones. Estos van mejorando su comprensión y su responsabilidad financiera y como el concepto de ‘que te paguen por aprender’ resulta todavía sorprendente, referencian la app a otros usuarios, lo que está resultando en una estrategia de crecimiento perfecta para la compañía.
Para las instituciones financieras asociadas, Zogo es la manera de adquirir y fidelizar clientes más jóvenes. Algunas instituciones financieras, como American Express, integran Zogo en su aplicación de banca móvil, con lo que todo apunta a que soluciones de educación learn2earn como la de Zogo evolucionen para convertirse en la próxima generación de los programas de fidelización bancaria.
Learnoverse, la escuela de educación crypto en el metaverso
Por último y para los más atrevidos vamos con Learnoverse, el primer metaverso de aprendizaje sobre criptomonedas lanzado por la plataforma de educación cripto BitDegree.
En Learnoverse, la experiencia de aprendizaje está completamente gamificada, incentivando el aprendizaje mediante la obtención de tokens y NFTs que habilitan la interacción con otros usuarios. Learnoverse permite a los estudiantes recorrer los distintos distritos del mundo virtual y descubrir temas sobre los que aprender participando en los cursos y superando los tests de evaluación creados por una organización descentralizada de mentores.
Y tú, ¿cuánto sabes de finanzas personales?