El ser humano ha logrado moverse con cierta libertad por tierra, mar y aire. En los grandes núcleos urbanos, el transporte terrestre sigue siendo el rey, relegando el aire para tareas exclusivas como vigilancia o transporte médico. Pero más pronto de lo que podríamos suponer, los aerotaxis podrían verse por el cielo de las ciudades con la naturalidad con la que ahora vemos taxis por las calles.
Las tecnologías y conocimientos generados en el diseño y fabricación de drones han permitido hacer evolucionar estos pequeños aparatos no tripulados hacia lo que se conoce como eVTOL. Estas siglas significan Vertical Takeoff and Landing. Es decir, despegue y aterrizaje verticales. Como los helicópteros. Y podríamos decir que se encuentran a camino entre los drones y los helicópteros. Con las ventajas de ambos, lo que los convierten en los candidatos ideales para extender el transporte de mercancías y personas en trayectos urbanos e interurbanos, eliminando así la exclusividad de los vuelos en helicóptero.
Empresas de todo el mundo trabajan en varios modelos de eVTOL que sean los suficientemente seguros, duraderos y económicos para hacer viables los vuelos de este tipo. Hay que tener en cuenta que todo lo que respecta al transporte aéreo, hay multitud de normas y reglas de seguridad para evitar accidentes y desastres que cuesten daños materiales. O, peor, vidas humanas. Pero aunque todo lo que tiene que ver con tecnología aérea discurre despacio para no cometer errores, ver aerotaxis por nuestros cielos está más cerca de lo que podríamos imaginar.
Aerotaxis en pruebas en España
Una de las empresas que desarrolla vehículos eVTOL es Ineco. Se trata de una compañía pública española creada en 1968. Y que, en sus propias palabras, “diseña soluciones integrales, innovadoras y tecnológicas que han permitido avanzar hacia un nuevo modelo de movilidad más sostenible y más segura”. Uno de sus proyectos más ambiciosos tiene que ver con aerotaxis o transporte con drones. Para ello está realizando pruebas reales en ciudades como Zaragoza, A Coruña y Jaén a través de SIAM, un clúster especializado en movilidad aérea que une instituciones, organismos y empresas con el mismo objetivo: revolucionar la movilidad aérea.
Las ventajas de los aerotaxis son muchas. Para transportar personas o mercancías a zonas de difícil acceso o rincones aislados o mal comunicados como las zonas rurales. De esta manera, donde no llegan las vías de tren o las carreteras, se puede ahorrar tiempo y recursos empleando estos dispositivos aéreos. Pilotados por control remoto o desde el propio aparato. Además, tienen otra gran baza: son eléctricos, por lo que contaminan mucho menos que sus hermanos propulsados por hidrocarburos. Y su autonomía ya les permite realizar viajes largos, tal y como ocurre como los automóviles eléctricos actuales.
Crisalion Mobility, antes conocida como UMILES NEXT, trabaja actualmente con un eVTOL que puede llevar seis pasajeros o 500 kilogramos de cargamento. Y su autonomía de vuelo es de 130 kilómetros. Su nombre es Concept Integrity y ya ha volado por los cielos de Jaén y Lugo. Por su parte, Bluenest es una compañía especializada en los vertipuertos o aeropuertos verticales. Serían las instalaciones necesarias para que despegasen y aterrizaran los vehículos eVTOL. Y entre otras ventajas con respecto a los helipuertos, ocupan menos espacio. Entre cinco y 20 metros cuadrados en función del tamaño del dron o aerotaxi. Esta compañía española ya realiza pruebas relacionadas con transporte sanitario en Madrid mediante drones. Y también prueban aerotaxis de 600 kilogramos en Jaén, Lugo, Canarias y Zaragoza.
¿2024, 2025 o 2030?
Si fuera por las empresas que trabajan en ello, ya podríamos estar viendo ahora mismo aerotaxis y drones no tripulados surcar el cielo. Pero como vimos antes, cualquier aspecto relacionado con el transporte aéreo debe cumplir con certificaciones, normas, autorizaciones y reglamentos. Algo que retrasa estos proyectos varios años por el bien de nuestra seguridad. Un simple accidente fortuito haría que todos los proyectos relacionados con vehículos eVTOL se paralizaran. Y perderíamos una gran oportunidad de acelerar el transporte de personas y mercancías en contextos en los que no siempre hay una alternativa.
Así, aunque las autoridades francesas expresaron su interés en ofrecer vuelos mediante aerotaxis durante la celebración de los Juegos Olímpicos de París 2024, tal vez no sea posible cumplir con el calendario. La regulación europea sobre vehículos eVTOL no estará lista hasta 2025. Eso si no sufre retrasos. Y el uso de aerotaxis no estaría disponible, a gran escala, hasta 2030, según las previsiones de algunos expertos. Al igual que ocurre con los drones actuales, a mayor tamaño, la legislación se complica. O mejor dicho, se vuelve más exigente para garantizar la seguridad.
Ya existe una legislación actualizada en Europa sobre drones por control remoto. Pero falta escalar esas reglamentaciones a vehículos eVTOL que, en la práctica, son drones pero de mayor tamaño. Y, en algunos casos, que transportarán personas. La buena noticia es que las empresas que desarrollan aerotaxis están en contacto con la EASA, la Agencia Europea de Seguridad Aérea, para lograr que sus vehículos estén certificados y cumplan con las normas actuales y futuras.