Basado en la tecnología de celdas de combustible, bastan dos cucharaditas de agua para producir electricidad suficiente como para cargar un smartphone.
Cuando pasas el día de aquí para allá dependiendo del teléfono móvil, en ocasiones resulta muy difícil disponer de una toma de corriente donde poder dar un respiro a la batería. Aunque las tomas de corriente brillan por su ausencia en la gran mayoría de espacios públicos, el agua es un elemento permanente en cualquier rincón de la ciudad. Esto mismo debieron pensar los creadores de My FC PowerTrekk, un novedoso cargador presentado en IFA 2013 que permite cargar smartphones con agua.
El funcionamiento de este novedoso cargador de móvil está basado en la tecnología de celdas de combustible. Basta con añadir dos cucharaditas de agua en un depósito habilitado para tal fin e insertar un disco de energía myFC, para que comience a generar la energía necesaria para cargar un smartphone de forma totalmente autónoma. Además, el cargador de pilas de combustible no sólo es capaz de producir energía con agua. Gracias a su tecnología híbrida también puede funcionar como una batería portátil de repuesto, cargándola cada vez desde una toma de ordenador portátil o un enchufe.
Esta tecnología se basa en la reacción electroquímica de conversión de energía para el reabastecimiento continuo de los reactivos consumidos. En este caso, los reactivos provienen de una fuente externa de combustible, los discos de energía desechables o pucks que vienen junto con MyFC Power Trekk, y el oxígeno aportado por el agua. Con esta reacción electroquímica se genera suficiente electricidad como para cargar un smartphone, en contraposición a la capacidad ilimitada de almacenamiento que posee una batería convencional. Además, los electrodos de las pilas de combustible son catalíticos y relativamente estables, a diferencia de las baterías ordinarias que cambian de polaridad en función de si la batería está cargada o descargada.
El grado de independencia que ofrece el cargador de pila de combustible con respecto a los sistemas convencionales de carga y la tecnología híbrida del dispositivo, nos permite elegir el modo de carga de nuestro smartphone, bien utilizando un disco de energía y unas cucharadas de agua, bien utilizando la energía almacenada previamente en la unidad de carga que incorpora. De forma totalmente autónoma de la red eléctrica podemos cargar desde teléfonos móviles hasta cámaras de fotos o unidades de GPS.
El coste del cargador ronda los 209 euros y viene equipado con un pack de tres pucks o discos de energía desechables, necesarios para reaccionar con el agua y producir la electricidad. Pero a pesar de los 5 euros que cuesta cada puck y que sólo dispone de un único uso, es una opción interesante para tener nuestros dispositivos cargados en caso de emergencia y sin posibilidad de acceso a la corriente eléctrica.
Imágenes | vía My FC PowerTrekk