Una compañía en la que participa Bill Gates pretende que, de 2030 en adelante, la energía nuclear pueda producirse a partir de residuos generados en la actualidad. De conseguirse, estaríamos ante una fuente energética limpia, no contaminante y sostenible. ¿Lo lograremos?
En el futuro, una de las grandes incógnitas será analizar cómo vamos a ser capaces de producir energía de manera económica y sostenible sin tener que dañar el medio ambiente, al mismo tiempo que garantizamos el abastecimiento energético del planeta. Dos cuestiones complicadas, sin duda, que suponen un verdadero desafío para la sociedad del siglo XXI.
En este contexto, hay voces que apuestan por la energía nuclear como la solución ideal a estos retos. Y es que este tipo de energía, liberada espontánea o artificialmente a partir de reacciones nucleares, cuenta con ventajas como la de no emitir dióxido de carbono a la atmósfera, lo que contribuiría a reducir las consecuencias del cambio climático.
Sin embargo, también existen personas muy críticas con la energía nuclear, dados los peligros hipotéticos que encierra. Y es que en la memoria de muchos se encuentran los terribles ataques sobre Hiroshima y Nagasaki. A pesar de estos difíciles recuerdos, la gran oposición actual a la energía nuclear no se basa exclusivamente en el peligro que supondría un atentado con bombas atómicas. La clave está en cómo gestionar los residuos nucleares.
Bill Gates busca la solución del problema energético
Si uno de los graves problemas asociados al uso de la energía nuclear es la generación de basura nuclear propiamente dicha, ¿no podríamos investigar alguna manera de acabar con ella, bien mediante su destrucción directa, bien mediante su reutilización?
Esta fue la pregunta que se hicieron desde TerraPower, una spin-off de la compañía Intellectual Ventures, que pretende reciclar estos residuos para que puedan ser utilizados como fuente de la energía nuclear del futuro. Con este fin, la empresa en la que participa el multimillonario Bill Gates, pretende que su tecnología revolucione por completo la forma de obtener energía a partir de 2030.
Y es que según un análisis realizado en el New York Times, los reactores diseñados para generar energía nuclear a partir de sus residuos, no estarían listos hasta esa fecha. La tecnología que están estudiando en estos momentos forma parte de los conocidos como reactores nucleares de cuarta generación, que reciben el nombre en inglés de traveling wave reactor.
TerraPower busca ahora un país que permita realizar las primeras pruebas con este tipo de reactores. Y parece que la nación que tiene más papeletas para comprobar su eficacia es China. De demostrarla, estaríamos ante una energía nuclear limpia, capaz de aprovechar los residuos generados en el pasado, y que además evitaría problemas relacionados con el desarrollo de armas nucleares.
La compañía de Gates, sin duda, tiene ante sí uno de los retos más difíciles de los próximos años: lograr una energía limpia, eficiente y sostenible. Aunque el debate sobre la energía nuclear sigue abierto, lo cierto es que solo la investigación científica y tecnológica podrá darnos las claves para saber hacia dónde nos dirigimos en el futuro.
Imágenes | Felix König (Wikimedia), Tim Collins (Flickr), Thomas Hawk (Flickr)