El fin es el de simplificar la instalación de equipamiento en el hogar así como la conectividad y las redes de acceso de banda ancha de Telefónica.
Ha pasado apenas un año desde que comenzáramos a narrar desde este mismo blog el comienzo de un viaje: el de la virtualización de red. Durante este tiempo se han recorrido muchos kilómetros, se han unido compañeros de viaje, se han cartografiado mapas y se han elegido nuevas rutas. Y, un año después, da comienzo una nueva etapa: la de poner en práctica las ideas y pruebas de concepto que hasta ese momento habían sido desarrolladas en un laboratorio de Telefónica I+D.
Así, durante el mes de octubre de 2013 se ha iniciado en Brasil, junto con NEC, el primer proyecto piloto que permite virtualizar parte del equipo que se instala en los hogares de nuestros clientes de banda ancha. Es lo que se conoce en inglés como virtual Customer Premise Equipment (vCPE). El fin es el de simplificar la instalación de equipamiento en el hogar así como la conectividad y las redes de acceso de banda ancha de Telefónica.
El vCPE permite desplazar las funciones “lógicas” de las pasarelas residenciales (el equipo instalado en el hogar del cliente) a la propia red de la operadora, de manera que se puedan actualizar, ampliar y operar de manera uniforme y mucho más centralizada. Se trata de que el router del hogar se limite a soportar las funciones básicas de conectividad (Wi-Fi, Ethernet y módem), comunes a cualquier posible arquitectura de red y servicio, mientras que el resto de la funciones susceptibles de adaptarse se proporcionen desde la red. Se da la interesante circunstancia de que esta nueva arquitectura no requiere reemplazar los routers actualmente desplegados en casa del cliente, pues basta una reconfiguración de los mismos para que interactúen correctamente en el nuevo entorno, lo que haría posible potencialmente la migración de toda la planta si fuera necesario.
Al minimizar la dependencia del hardware ya desplegado en dependencias del cliente (al que se exigen sólo funciones básicas), la virtualización traerá considerables beneficios tanto para el cliente final, que se beneficiará de un servicio más ágil y de una mejor experiencia de cliente, como para la propia gestión de la red de la operadora, que será más sencilla y uniforme. Así, se espera que con esta nueva tecnología la gestión de la red sea mucho más sencilla y flexible, al tiempo que las posibles incidencias y averías en casa del cliente se reducen. Además, la moldeabilidad que ofrece el nuevo modelo de conectividad residencial es idónea para facilitar el despliegue de nuevos servicios en el hogar en los próximos años, acortando su time to market y reforzando la experiencia de conectividad del cliente.
La solución que se está probando en el piloto está basada en tecnologías y arquitecturas de virtualización de red desarrolladas originalmente por Telefónica I+D, que están siendo industrializadas por NEC, quien también las integra con el resto del entorno de la operadora. El primer servicio incluido en el piloto –al que irán uniéndose otros de seguridad, diagnóstico avanzado, vídeo, etc. a lo largo de la duración del mismo— es el acceso dual a Internet con IPv4 e IPv6, ofrecido independientemente del modelo de router (nuevo o antiguo) o el tipo de acceso (cobre o fibra) que tuviera previamente el usuario.
A través de este trabajo conjunto, Telefónica y NEC están poniendo en común sus capacidades tecnológicas con el fin último de demostrar la viabilidad de la tecnología y desarrollar de manera comercial el vCPE y con ello, hacer posible que la innovación, que comenzó en un laboratorio, llegue finalmente al mercado y al cliente.