Este aerogenerador genera seis veces más energía que los molinos de viento convencionales al hacerlo pasar por un acelerador antes de que giren las aspas.
España es el primer país del mundo donde la eólica es la primera fuente generadora de energía. En el último año se batieron los récords de cobertura de demanda (con un 20,9%), y de oferta (90% del consumo de los hogares españoles).
Entre las causas y los efectos de estas cifras está que España es una potencia mundial en esta industria destacando en diseño, construcción e instalación de parques eólicos. En la actualidad, se invierten cerca de 120 millones de euros en I+D en la industria eólica y existen multitud de proyectos internacionales que están siendo llevados a cabo por empresas españolas.
En cuanto a energía eólica total producida, Estados Unidos es la primera potencia mundial, y es precisamente de ahí de donde viene una interesante innovación. Una pequeña empresa de Minnesota, Sheerwind, ha patentado un generador eléctrico, Invelox, basado en el efecto Venturi. Este efecto, permite que un fluido en movimiento se desplace de menor a mayor velocidad y viceversa al pasar de un conducto amplio a otro más angosto, con lo que aumenta su presión y puede generar más energía mecánica sobre unas aspas situadas al final de dicho conducto.
En el mundo de la energía eólica se ha avanzado mucho y esto ha permitido conocer con exactitud las leyes que la gobiernan. Esto no quita para que se realicen investigaciones que busquen innovaciones disruptivas en este campo como las realizadas por esta empresa americana y su aerogenerador “sin aspas”.
Invelox, aerogenerador poco parecido a los molinos de viento
Según indica la empresa en su web, Invelox captura, acelera y concentra el aire para aprovechar toda su energía cinética. El aerogenerador recoge el aire en lo más alto de su estructura y lo conduce hacia el suelo a través de una gran tubería. Al final de la misma el diámetro se reduce considerablemente, concentrando el aire al pasar por esta sección. Es en este punto donde se produce el mencionado efecto Venturi.
Debido a este efecto, la velocidad del aire aumenta y con ello la presión que genera sobre unas aspas instaladas justo antes del final de la tubería para que el aire salga y vuelva al medioambiente.
Sheerwind afirma haber conseguido en las pruebas realizadas que pueden llegar a acelerar el viento de 16 a 64 Km/h y mover las aspas de la turbina a 12,5 metros por segundo generando 600W de potencia, con lo que incrementa la energía generada respecto a un molino de viento convencional entre un 80% y un 640%.
Por otro lado, el tamaño de la estructura necesaria del Invelox es la mitad del de un molino de viento tradicional, con lo que el impacto visual se reduce considerablemente. Además, al no tener aspas en lo alto de la torre, evita problemas medioambientales como la contaminación acústica y la muerte de aves migratorias al chocar contra las aspas en movimiento.
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