Los planes para construir una base submarina china de investigación incluyen la implementación de un sistema de IA que gobierne las instalaciones.
El impulso de China a la inteligencia artificial queda más que patente. A lo largo de los últimos años, el país asiático ha apostado decididamente por este campo y por todas sus ramificaciones. No lo ha hecho en un sentido conceptual, desde el punto de vista académico. Ha incentivado la investigación en IA tanto en el sector público como privado y, habitualmente, con fines aplicativos.
El gobierno chino cuenta con un plan para liderar el terreno de la inteligencia artificial en 2030. Se trata de una serie de estímulos a la investigación y al mercado. El país prevé que en 2020 el volumen de su mercado de IA ascienda a 22.000 millones de dólares. En 2025 serán 59.000 millones los que se moverán en este sector. Para llegar finalmente a 2030, cuando el volumen se medirá con la astronómica cifra de 150.000 millones de dólares.
Con estas perspectivas en mente, no extraña que China emprenda incluso los proyectos más insólitos acompañada de inteligencia artificial. Aquí se enmarca la creación de la base submarina china dedicada a la investigación.
Estas instalaciones se regirán exclusivamente por inteligencia artificial. Así lo han señalado responsables del proyecto al diario hongkonés South China Morning Post. En declaraciones a este medio, estas fuentes también apuntaron que la base sería la primera colonia de inteligencia artificial sobre la Tierra.
La IA imprime la dirección
Lo cierto es que hablar de una colonia de inteligencia artificial es introducir términos demasiado futuristas. Sin duda, este tipo de lenguaje es más un guiño a la ciencia ficción que una descripción precisa de cómo será la base submarina china.
La inversión en estas instalaciones se prevé de 160 millones de dólares. La profundidad a la que se establecerá estará entre 6.000 y 11.000 metros. Hay que recordar que la segunda cifra es de hecho la de mayor profundidad que se conoce en todos los océanos, la de las Fosas Marianas. Esta cicatriz en la corteza terrestre marina se encuentra cerca del Mar del Sur de China, que ha sido el lugar elegido para establecer la base. Si bien la zona exacta no se ha definido aún.
Todo será automático en la base china de investigación. Habrá submarinos que saldrán a explorar periódicamente, con el fin de recopilar información sobre las formas de vida del fondo marino. También se recogerán datos sobre los minerales presentes en las profundidades. La alimentación energética de la base se hará mediante cables que irán desde la base a un barco o plataforma.
Las instalaciones son una muestra más de cómo China se ha planteado apoyarse decididamente en la robótica. En áreas de tanto calado, como la investigación, la IA ofrece un camino para China. Pero también en otras, de carácter más cotidiano, como el diagnóstico médico en poblaciones rurales.
Imágenes: MartinStr, Kieren Andrews