El proyecto CHIP será un ordenador que cueste 9 dólares, pero con todas las funcionalidades básicas de un equipo informático.
El abaratamiento de la tecnología está alcanzando cotas escandalosas. Así lo demuestra el proyecto CHIP, publicado en Kickstarter, donde al cabo de unos días, su objetivo de financiación de 50.000 dólares se ha visto arrasado y ya cuenta con más de un millón de dólares en fondos. Esta enorme inversión se puede entender por el entusiasmo suscitado por esta creativa iniciativa, cuyo precio es cuatro veces inferior al de una Raspberry Pi.
Si las placas de Arduino o las Raspberry Pi han dado un fuerte impulso a la experimentación con el hardware, el papel que va a jugar CHIP en este ámbito promete dar que hablar. El proyecto se ha dado a conocer a través de Kickstarter, pero sus fronteras se van a expandir mucho más allá de la plataforma de crowdfunding.
Las características de CHIP son sorprendentes para tener un coste de solo 9 dólares. Cuenta con un procesador de 1GHz y 521 MB de RAM, así como 4 GB de almacenamiento. En lo que se refiere a la conectividad, dispone de conexión WiFi y bluetooth, para conectar periféricos sin necesidad de cables.
El dispositivo mide 5,8 x 3,8 cm y en este espacio contiene un sistema Linux que permite llevar a cabo las tareas para las que normalmente se usa un ordenador. CHIP viene con una serie de aplicaciones instaladas, como Chromium para navegar o el VLC para reproducir archivos multimedia. El secreto de su ínfimo precio es su SoC (system on a chip) Allwinner, que se puede encontrar en las tripas de muchas tabletas chinas de bajo coste.
Por el momento los creadores de CHIP señalan aplicaciones corrientes para su producto, tales como navegar en Internet, trabajar en la edición de documentos con LibreOffice o jugar a videojuegos. Aunque también han apuntado otros más específicos, como aprender programación o crear música, conectado a un sintetizador. Sin embargo, a nadie se le escapa que el ordenador se podrá utilizar para proyectos a gran escala, no solo a nivel de usuario.
En el caso de Raspberry Pi, el dispositivo se emplea en iniciativas educativas por su maleabilidad y también por su carácter económico. CHIP va a ser más barato todavía y su entorno de software libre lo convierte en una herramienta versátil. Para que lo sea más aún los creadores del proyecto ofrecen complementos a su ordenador. Por diez dólares más se puede adquirir una batería externa o un adaptador VGA. Conseguir un adaptador HDMI costará 15 dólares más.
CHIP también se ofrecerá en paquetes de varias unidades, combinado con alguno de los complementos. En este caso el producto se dirige a la experimentación académica o amateur. En cualquier caso, hasta finales de 2015 no se realizarán los envíos de las primeras unidades. Toca esperar.
Imágenes: Kickstarter