Es importante prestar atención a las siguientes señales, que ayudarán a detectar si tu móvil ha sido hackeado y a saber qué medidas se deben tomar.
El móvil, desde hace tiempo, ha dejado de ser el instrumento para solo realizar llamadas y se ha convertido casi en una extensión más de nuestro cuerpo. La multitud de opciones que ofrece, como tomar fotos, hacer vídeos, pagar desde el móvil o reconocer nuestra cara para desbloquearse, lo han convertido en indispensable para nuestro día a día.
Por esta razón, cuando vemos que no va con la misma rapidez que antes, que los datos se gastan más rápido de lo habitual, o que sencillamente desde nuestro móvil se envían mensajes sin que lo sepamos, la intuición de que algo va mal comienza a rondar nuestra cabeza. Por eso, es importante prestar atención a las siguientes señales, que ayudarán a detectarlo y a saber qué medidas se deben tomar.
## Funcionamiento lento
Esta es la causa más común. Aunque se sabe que muchas aplicaciones y actualizaciones del software lo ralentizan, también es cierto que si no se ha realizado ninguna de esas dos operaciones puede ser que un malware esté rondando nuestro Smartphone.
## Recibes y envías mensajes desconocidos
Los primeros en avisarte sobre esto serán tus amigos y familiares, ya que si son mensajes que se envían desde nuestro teléfono, no nos enteramos. Estos pueden ser vía SMS o WhatsApp. Es importante alertar a los contactos para que no abran los enlaces, así como estar atentos para no “picar” en nuestra propia trampa.
## Descubres nuevas apps que no has descargado
En el caso de que veamos que los datos se consumen más rápido de lo que deberían es importante comprobar qué aplicaciones están abusando del rendimiento de nuestro teléfono. Además de revisar que no se hayan instalado sin darnos cuenta. Ante esta situación, es importante verificar que sea legal, ya que muchas veces pertenecen al propio sistema operativo o a la compañía telefónica que comercializa el terminal. Google Play puede ser una buena primera referencia de consulta.
## Sobrecalentamiento
Muchos creen que esto se debe al uso inadecuado a la hora de cargar la batería, ya que los expertos afirman que cuando se conecta y desconecta el móvil de la corriente sin haber esperado a que se cargara de manera completa puede dañar la batería y sobrecalentarla. Sin embargo, ¡cuidado! puede ser que un malware este trabajando desde un segundo plano.
## La batería se agota rápido
Suele estar directamente relacionado con el sobrecalentamiento. Una forma de prever esto es verificando que no tengas ninguna app en segundo plano que te esté agotando la batería más de lo normal.
Hay muchos consejos que te ayudan a confirmar tu intuición de que algo no va bien. Pero también existen servicios que te facilitan mucho este trabajo. TU Latch es una plataforma de control de autorizaciones con este objetivo: proteger tu vida digital. Sus pestillos digitales protegen tus cuentas y perfiles digitales mediante los códigos TOTP, añadiendo una capa extra de seguridad que también funciona como obstáculo extra para los ciberdelincuentes que se les ocurra atacar tus dispositivos. Descárgala ya y empieza a combatir los riesgos y ataques externos a tu vida digital.
Ahora que sabemos cómo detectar si algo no va bien, llega la pregunta complicada: ¿qué hacemos? La respuesta no es tan difícil. No navegar desde redes desconocidas, no descargar imágenes ni documentos desde una página desconocida o abrir correos electrónicos de remitentes no habituales. En temas de instalaciones en el móvil, descargar un antivirus, al igual que en los ordenadores, puede prevenir un ataque cibernético.
Pueden existir prevenciones mucho más drásticas, como por ejemplo apagar el bluetooth al salir de casa, tapar la cámara del móvil por si están accediendo sin tu permiso a ella, o extraer la batería cuando no lo estemos utilizando.
Todo el mundo es vulnerable a sufrir un ciberataque, por eso, tomar medidas que dificulte actuar en un segundo plano es lo único que podemos hacer. Haciendo caso a estas recomendaciones podremos proteger nuestros contactos, datos personales, bancarios, contraseñas… pero recordad, como bien dice Pedro Pablo Pérez, la seguridad total no existe.