Volkswagen y Microsoft extienden su alianza de forma global para que los automóviles conectados de la primera tengan acceso a diferentes servicios online.
La asociación podría ser atípica hace solo unos años atrás. Pero, a estas alturas, nadie duda ya de que un fabricante de automóviles como Volkswagen necesita una nube, y también un proveedor. En este caso, Microsoft, que le permita prestar servicios online a sus clientes.
La Volkswagen Automotive Cloud está destinada a ser la columna vertebral del ecosistema digital del fabricante de automóviles. Se trata de una plataforma a través de la cual la compañía distribuirá a sus coches conectados una serie de servicios.
La plataforma cloud ofrecerá desde servicios de música en streaming a información de viaje e incluso herramientas de productividad. Todo este paquete vendrá servido desde Micrososft Azure, aunque Volkswagen también utilizará la plataforma IoT Edge del gigante de Redmond.
Parece claro que el futuro del coche conectado pasa por la prestación de servicios a través de la nube. La llegada del 5G facilitará la conexión de todos estos automóviles a la Red, y se espera que con ello se facilite el uso de software de utilidades y entretenimiento en los vehículos.
El primer coche que usará la Volkswagen Automotive Cloud rodará en 2020 por las calles de Europa. Este ha sido el germen de la alianza entre Volkswagen y Microsoft, anunciada el pasado año. Ahora, ambas compañías profundizan en esta colaboración, que se extenderá a China y a Estados Unidos. En el país asiático, el primer automóvil con estos servicios cloud llegará también en 2020. A Estados Unidos desembarcará en 2022.
El coche conectado como primera piedra del futuro
Hoy en día. en automoción las tendencias tecnológicas más en boga pasan por el coche eléctrico y el coche autónomo. Se trata de dos renovaciones de distinta índole. Una afecta a la ingeniería, y otra ataca directamente el concepto del vehículo, para lo que se apoya en el software.
Los coches autónomos estarán irremisiblemente ligados al ámbito digital, eso parece claro. Pero los eléctricos también lo estarán, pues será imprescindible información sobre el estado de la batería e, incluso, el acceso a un mapa con los puntos de carga más cercanos.
Sin embargo, los primeros servicios que se han desplegado en los vehículos son los del coche conectado. De ahí que Volkswagen, quien ha dado un enorme impulso a los eléctricos últimamente, quiera consolidar su nube. Microsoft, por su parte, ve como una parte principal de su negocio los servicios cloud a empresas. Así que acercarse al sector de la automoción parece, a todas luces, un movimiento sensato.
Imágenes: Volkswagen