Descubre lo último en deportes veraniegos 2.0: desde scooters que funcionan bajo el agua, pasando por tablas de surf para las manos, hasta el Flyboard
Puedes seguir jugando a las palas o construir castillos de arena, pero si de verdad quieres disfrutar, prueba a propulsarte 12 metros por encima del mar, conducir una scooter submarina o surfear a 57 km/h sin necesidad de viento ni de olas siquiera.
Deportes veraniegos 2.0
Ya nada es como era y los deportes náuticos tampoco. El milagro de caminar sobre las aguas queda eclipsado por la posibilidad de propulsarse hasta 12 metros sobre ellas. El Flyboard, con el que Leonardo DiCaprio disfrutaba hace unos días en Ibiza, olvidando las penurias del Titanic, es una tabla que se conecta a una moto de agua y te permite volar gracias a unos propulsores emplazados bajo los pies. ¡Tranquilo!: las boquillas de las manos se usan para asegurar la estabilidad como si fueran bastones de esquí. Puede tener uno mismo el control completo o darle gas otra persona desde la moto de agua.
Con esta divertida opción, el alquiler de una moto de agua sin más ya resulta anticuado, claro… a menos que se trate de una moto submarina. Algunos llegan a las vacaciones demasiado agotados como para desplazarse a golpe de aleta. Pues bien: ahora pueden vivir las inmersiones en scooter. El Bladefish 3000 —que así se llama el invento— puede sumergirse hasta 30 metros, alcanza una velocidad de más de 4 km/h, es muy sencillo de manejar porque todos los controles necesarios están en el asa de agarre y funciona con baterías recargables que le dan una autonomía de 40 minutos.
Pero para quienes no quieran elevarse sobre el agua ni sumergirse, sino estar en la cresta de la ola, también hay novedades. El surf, más que un deporte, es un estilo de vida y hasta ha conseguido crear una estética propia de la que se hacen eco cada verano las revistas de moda. El mar, el sol, la adrenalina, la sensación de libertad son atemporales, pero no las tablas, y la manera de coger las olas también ha cambiado mucho desde que hace más de 500 años empezara esta práctica en las islas de la Polinesia.
Los últimos en aportar su granito de originalidad a este deporte vienen del mundo del motor. Así, Peugeot presentaba el mes pasado una tabla de surf en fibra de carbono y madera basada en sus modelos deportivos. Con un esculpido diseño, preciso y técnico, el GTi Surfboard Concept presenta un singular corte, que separa la parte delantera y la trasera de la plancha.
Pero ingenieros de la MotoGP y de la Formula1 han ido más allá, no les ha debido parecer suficiente la velocidad de las olas y han incorporado a la tabla de surf un motor de alto rendimiento, que permite alcanzar 57km/h. JetSurf permite surfear sin depender del estado del mar ni esperar a que vengan las olas.
Si eres de los que piensas que el verano está para pisar el freno, tienes la opción de ser el más original del lugar con las tablas de surf… ¡para las manos! De la marca australiana Deus ex Machina (“Dios a través de la máquina”). Esta marca comenzó trabajando, por encargo, para aquéllos que buscaban personalizar sus motos con caprichos imposibles de encontrar en el mercado, pero pronto de las motos pasaron a la moda, al skate o al surf, y su punto alternativo los ha llevado a este nuevo diseño para surfear con unas tablas para las manos, fabricadas artesanalmente con madera de las antípodas, recubierta con resina biológica y que se sujetan con correas.
Y un guiño para los más clásicos: quienes ya hacían barquitos de papel en el cole, disfrutarían de lo lindo con el Oru Kayak, que permite llegar a la playa con un maletín bajo el brazo del que sale, en plan Inspector Gadget , un kayak plegable de 3,66 metros de largo y 63,5 cm de ancho . La embarcación está fabricada en materiales plásticos de larga duración, y admite hasta 20.000 ciclos de apertura y cierre sin que se dañe la estructura.
Este verano, la innovación está servida.