Ya estamos inmersos -o casi inmersos- en el ansiado verano. Seguramente estemos todavía cerrando temas laborales para poder irnos toda la familia de vacaciones. Querría aprovechar este artículo para proponerte a ti y a tus hijos algo que os va a unir enormemente y con lo que redescubriréis las largas conversaciones olvidadas después de una buena comida. Mi propuesta para este verano es que hagamos un buen detox digital.
Habrás escuchado de las famosas dietas detox, limpieza del cuerpo, que normalmente se logra haciendo cambios en la alimentación para facilitar que nuestro organismo elimine impurezas, residuos y toxinas.
Algo similar hacemos con los detox digitales. Intentamos reducir el tiempo de consumo de pantallas para hacer otras actividades offline que también nos satisfacen.
Para muchos niños y adolescentes, el verano significa más tiempo libre y la posibilidad de sumergirse en el mundo de las pantallas sin fin: móviles, ordenadores, tablets… Sin embargo, para vosotros padres, la gestión del uso de tecnología en esta época puede ser un gran desafío.
¿Cómo encontrar el equilibrio adecuado entre el tiempo dedicado a las pantallas y otras actividades?
Lo primero de todo es importante tener en cuenta la edad de tus hijos. A la hora de establecer pautas para el uso de pantallas, no será lo mismo que tu hija tenga 3 años o 14. Te recuerdo lo que la Academia Americana de Pediatría recomienda de exposición a pantallas según edades:
- 0 – 2 años: Nada de pantallas.
- 2 – 5 años: Entre media y una hora al día.
- 7 – 12 años: una hora con un adulto presente. Nunca en horas de comidas.
- 12 – 15 años: Una hora y media. Especial vigilancia en redes sociales.
- Más de 16 años: Dos horas. Los dormitorios no deben tener pantallas.
Esto contrasta con que ocho de cada diez niños y niñas de entre 8 y 16 años en España pasan casi cinco horas al día frente a una pantalla durante los fines de semana. Esa cantidad de tiempo viendo la televisión, usando el ordenador o el móvil es disparatada. Sobre todo por el tiempo que no dedican a otras actividades que también les aporta a sus vidas. Los datos salen del estudio PASOS, que evalúa los estilos de vida y la salud de los niños y niñas españoles de 8 a 16 años. Tras comparar el día a día de más de 3.000 escolares de 245 centros educativos de todas las Comunidades Autónomas, antes y después de la pandemia.
Claves para encontrar el equilibrio.
Una vez te hayas situado en la franja de edad correspondiente a tus hijos, te recomiendo que hagas este pequeño checklist. Lo mejor es que te sientes con cada uno de tus hijos para concretarlo en un folio en blanco y vayas rellenando. Como verás en este listado, no sólo se trata de evitar aquello que nos preocupa -que pasen mucho tiempo, que se relacionen con extraños, que consuman contenidos dañinos- sino de fomentar aquello que ayudará a tus hijos a que se conviertan en personas felices. Personas que sean motores de cambio, de creatividad, de servicio a los demás… ¡Vamos allá!
- ¿Cuánto tiempo voy a utilizar el móvil/tablet -si es que lo tienes-?*
*Es bueno diferenciar entre un día entre semana y el fin de semana.
- ¿En qué lugar de la casa podré usarlo? (evitad sitios cerrados)
- Antes de empezar a usar cualquier dispositivo (TV, ordenador, móvil…) revisa si tienes tu habitación ordenada -esto les ayudará a ser personas responsables-.
- ¿Cuánto tiempo y cuándo voy a dedicar a hacer la tarea de verano?
- ¿Qué libros tienes fichados para este verano? Te recomiendo una visita a la biblioteca pública o a la librería para hacerte con buenos libros.
- ¿Hay alguna actividad que te gustaría aprender? (tocar un instrumento, programar, dibujar, clases de algún deporte, manualidades).
- ¿Cómo voy a ayudar en casa? (Uno o dos encargos para echar una mano en las labores de casa).
- ¿Dónde voy a dejar el móvil cargando por la noche?
De lo que se trata es de que tengan alternativas buenas para que no estén únicamente con dispositivos electrónicos. El verano es para disfrutar y aprender y los móviles pueden ser perfectos para cumplir este objetivo, siempre y cuando, estén integrados en el día a día, rico en actividades, tanto online como offline.
Imagen de Brand Factory.