Fin de las contraseñas

Llegó el fin de las contraseñas: ¿qué viene después de ellas?

Durante décadas, las contraseñas han sido la puerta de entrada a nuestro entorno digital. Memorizar combinaciones de letras, números y símbolos se volvió parte de la rutina: desde abrir el correo, hasta entrar en la banca online. Pero esa misma rutina se convirtió en un dolor de cabeza. Las grandes tecnológicas, como Google o Microsoft, ya están empujando con fuerza el fin de las contraseñas, apostando por alternativas más seguras. 

El debate no es nuevo; basta con repasar la historia de Google para entender cómo las formas de autenticación han cambiado a lo largo de los años.

Y sí, aunque suene a futuro lejano, lo cierto es que este cambio ya empezó. Quédate y sigue leyendo para conocer qué tan frágiles son las contraseñas y cómo será la transición hacia sistemas que prometen dejar atrás los viejos problemas.

¿Cuáles son las principales debilidades de las contraseñas?

Aunque han sido el método estándar durante años, las contraseñas arrastran defectos graves que nos ponen en riesgo. Estas debilidades se repiten sin importar el sector o la plataforma, y reflejan por qué urge el cambio. Expertos en ciberseguridad coinciden en que son poco fiables y cada vez más vulnerables (XatakAndroid, 2025).

Contraseñas débiles

El clásico “123456” o el nombre de la mascota siguen estando en el top de las claves más usadas.

 La gente busca lo fácil de recordar, pero eso significa también lo fácil de adivinar para un atacante.

Reutilización entre diferentes plataformas

La mayoría de los usuarios repite la misma clave para varias cuentas. Así, si una base de datos cae, todas las demás quedan expuestas. Lo cómodo se convierte en un efecto dominó de inseguridad.

Almacenamiento inseguro y exposición constante 

Cada año se filtran millones de contraseñas de bases de datos poco protegidas. En 2023, por ejemplo, se reportaron exposiciones masivas que afectaron a millones de usuarios alrededor del mundo (Xataka, 2025a). Este fenómeno demuestra que no importa cuán robusta sea tu clave: si el servidor donde se guarda no está blindado, el riesgo es inevitable.

Al final, la cadena siempre se rompe por el eslabón más débil: los usuarios. Y mientras dependamos de la memoria humana o de notas pegadas en el monitor, el sistema seguirá siendo frágil.

Fin de las contraseñas: ¿cuáles alternativas se están impulsando?

El fin de las contraseñas no significa quedarse sin seguridad, sino cambiar de estrategia. Ya existen tecnologías que buscan reemplazarlas (LACNIC, 2025):

  • Llaves de acceso (passkeys). Se apoyan en criptografía avanzada para generar credenciales únicas. Se almacenan en tus dispositivos, no en servidores centrales, lo que dificulta los ataques.
  • Biometría (huella y reconocimiento facial). Tu cuerpo se convierte en la clave. Es práctico, rápido y ya lo usamos en móviles para desbloquear apps o cuentas.
  • Autenticación multifactor. Combina algo que sabes (PIN), algo que tienes (móvil) y algo que eres (huella), logrando una seguridad reforzada.

Estas soluciones prometen cerrar la puerta a la mayoría de ciberataques. Sin embargo, enfrentan retos: no todos los usuarios están listos para adoptarlas, dependen de dispositivos específicos y, en algunos casos, de infraestructura moderna que no siempre está disponible.

Fin de las contraseñas: preguntas frecuentes más comunes

Es normal tener dudas. Si toda la vida hemos usado contraseñas, pasar a un mundo sin ellas genera inquietudes. Algunas de las preguntas que más se hacen las personas son:

  • ¿Qué son las llaves de acceso? Son credenciales digitales que sustituyen las contraseñas y se sincronizan en tus dispositivos de confianza.
  • ¿Son seguras las huellas digitales? Sí, aunque no son infalibles. Ofrecen más seguridad que una clave escrita, pero requieren hardware confiable (Aware, s.f.).
  • ¿Cuándo desaparecerán las contraseñas? Las grandes tecnológicas ya dieron el primer paso, pero el cambio será progresivo.
  • ¿Qué pasa si pierdo mi dispositivo de confianza? Existen mecanismos de recuperación, aunque puede ser un proceso más complejo que restablecer una contraseña.
  • ¿Seguiremos usando contraseñas en algunos sitios? Sí. Plataformas pequeñas o sistemas antiguos seguirán funcionando con contraseñas mientras se adaptan, lo mismo que ocurre con conexiones tradicionales en dispositivos básicos como el puerto USB del router.

En resumen, la transición será gradual: lo nuevo convivirá con lo viejo hasta que el cambio sea completo.

Fin de las contraseñas: ¿cuándo se eliminarán por completo?

Estamos en medio de una revolución silenciosa. Google ya permite iniciar sesión sin contraseñas (Xataka México, 2025), Microsoft las está relegando y cada vez más empresas adoptan sistemas biométricos o passkeys (Xataka, 2025).

Sin embargo, el fin de las contraseñas no será inmediato. Durante años conviviremos con ambos métodos. Para los usuarios significa que no hay que temer, sino adaptarse poco a poco. Más que un reemplazo repentino, hablamos de un cambio de paradigma en la seguridad digital.El fin de las contraseñas no es un sueño lejano, es una realidad en construcción. Y mientras tanto, seguiremos viendo cómo lo cotidiano se mezcla con lo nuevo: desde configurar apps en el móvil hasta recordar que algún día habrá que dejar atrás esas claves escritas en papel.

Referencias Bibliográficas:

  • Aware. (s.f.). Hacia un futuro sin contraseñas con el poder de las Passkeys y la biometría.
  • LACNIC. (2025, 6 de junio). Despídete de las contraseñas con Passkeys.
  • Xataka. (2025a). El viejo sueño de la ciberseguridad del futuro acaba de hacerse realidad: Microsoft arrincona el fin de las contraseñas.
  • Xataka México. (2025, 17 de enero). Google cambió para siempre y le dijo adiós a las contraseñas: existe un nuevo método para iniciar sesión y así se configura.
  • Xataka. (2025b). ¿Cada cuánto debemos cambiar todas nuestras contraseñas? Tres expertos en ciberseguridad.
  • XatakAndroid. (2025). La vicepresidenta de Seguridad en Google es tajante: “Las contraseñas nunca debieron existir”.

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