La primera experiencia de realidad virtual del Museo del Louvre llega con La Gioconda en 3D, recreada con ayuda de HTC Vive.
"Adentrarse dentro del universo del cuadro", este es el objetivo del proyecto realizado sobre la obra maestra de Leonardo da Vinci por el Museo del Louvre con la colaboración de HTC Vive. Se trata de un experimento de realidad virtual que permite al espectador-visitante ver La Gioconda en 3D.
La idea es que quien quiera que se coloque una de las gafas que ya están disponibles en el Louvre pueda observar el cuadro desde otro punto de vista. Hay que tener en cuenta que una visita a este museo, el más visitado del mundo y probablemente el más famoso, obliga a detenerse delante del cuadro de Leonardo da Vinci. Pero la experiencia puede decepcionar. Frente a la pintura suele agolparse un buen racimo de visitantes que impiden acercarse todo lo deseable. A esto hay que sumar la distancia que existe entre el cuadro y la barrera de seguridad que coloca el museo.
Tampoco ayudan las dimensiones de la obra, que no es ni mucho menos uno de esos grandes murales pensados para adornar paredes enteras. Así que el visitante puede acabar con un sabor agridulce después de pasar por la sala de La Gioconda. La introducción de la pintura en un entorno de realidad virtual puede contribuir a que los visitantes profundicen en el cuadro.
Los responsables del proyecto han empleado tecnología infrarroja, rayos X y han jugado con la refracción de la luz para crear esta experiencia de realidad virtual. La han bautizado como 'Mona Lisa: Beyond the Glass' y ha logrado renderizar el famoso retrato en tres dimensiones, así como deducir cómo habrían sido los movimientos de la pintura.
Pasar un retrato renacentista a 3D
La experiencia, según los responsables del proyecto, permitirá que el espectador se adentre no solo en la debatida mirada que da centro al cuadro. También será posible navegar por los paisajes de montaña que aparecen de fondo en la pintura y que normalmente pasan desapercibidos ante la fuerza del rostro retratado.
La realidad virtual también permitirá revelar detalles sobre las técnicas utilizadas por el autor. Se trata en definitiva de una forma de**** hacer difusión del arte, de popularizarlo. A esto contribuyen de forma interesante las nuevas tecnologías. El Museo del Prado las ha utilizado en su bicentenario, como demuestran los cursos MOOC que permiten a cualquiera saber más sobre alguna parte de su colección sin moverse de casa. La plataforma MIRÍADAX ofrece uno de estos cursos centrados en la obra de Velázquez contenida en el museo.
En cuanto al Louvre, siempre ha sido pionero en las nuevas tecnologías. Fue uno de los primeros museos que facilitaron el acceso online a parte de su catálogo. El nuevo proyecto va en la misma dirección.
Imágenes: Vive