El impacto del mundo 2.0 en usuarios y marcas es enorme. Cada vez más son los negocios los que aprovechan el tirón de la red para promocionar sus productos y servicios, además de publicitarse entre sus clientes.
Una de las redes sociales que más éxito ha tenido en los últimos años es, sin lugar a dudas, Instagram. Su lanzamiento inicial ocurrió en 2010, aunque no sería hasta 2011 y 2012 cuando su difusión entre los usuarios crecería exponencialmente. Hoy en día existe una aplicación disponible tanto para iOS y Android y su éxito ha sido tal que, hace algo más de un año, Facebook anunció su compra por mil millones de dólares.
Hoy muchos de los que disfrutamos de un smartphone usamos esta aplicación para darle un toque diferente a nuestras fotografías. Cuenta con filtros que nos recuerdan a las cámaras Polaroid o Kodak Instamatic, de forma que las imágenes que tomemos con nuestros dispositivos móviles tienen un punto especial. Además en la última actualización de Instagram, se incorporó la opción de subir vídeos además de fotografías, siendo una clara competencia para Vine, otra app de la que ya os hablamos anteriormente.
La gran ventaja que presenta Instagram no sólo reside en realizar y subir a la red imágenes diferentes. Gracias a esta app podemos compartir nuestras fotografías en otras redes, tales como Facebook, Twitter, Tumblr o Flickr, de forma que ya seamos un usuario o una marca, la difusión de las imágenes que nos interesen tendrá un mayor impacto.
Esta última característica es la que últimamente están aprovechando algunos sectores de negocio donde precisamente el «boca a boca», o en este caso, el «ojo a ojo», es fundamental, como el turismo. La hostelería cada vez se interesa más por el impacto que la comunicación online pueda tener sobre sus clientes (presentes o futuros), en relación con su compañía.
¿Y qué mejor promoción que para un restaurante el contar su menú y platos especiales con imágenes diferentes? También podemos encontrarnos con un hotel que ofrezca descuentos a los usuarios 2.0 que ayuden a difundir su marca. Hoy en Think Big os contamos algunos ejemplos en los que Instagram ha pasado a ser una clara oportunidad de negocio.
Tu plato favorito en Instagram
Varios son los restaurantes que se han apuntado a la moda de usar las redes sociales en su estrategia de comunicación. E Instagram no iba a quedarse a un lado. Un ejemplo claro es el de El Celler de Can Roca, que organizó un concurso de fotografía para elegir a la instagramer que inmortalizaría un día de servicio de este popular restaurante bajo la etiqueta #UndiaalCeller. Otra muestra de éxito de esta red en hostelería es la que promociona el restaurante Gallo Pinto de Santo Domingo en República Dominicana.
La idea de usar Instagram en hostelería es que o bien usemos este canal como medio publicitario, o bien los usuarios hablen de nosotros. Dinamizar nuestra marca, como también hace el restaurante Empellon de Nueva York, es una buena forma de acercar la cocina a la red, y de promocionar nuestros productos y servicios.
En el futuro es probable que muchos más restaurantes y otros establecimientos de hostelería se apunten al uso de esta aplicación. Instagram ha pasado de ser una mera anecdótica aplicación a una oportunidad de negocio relevante.
Imágenes | Karl Nilsson (Flickr), Aaron Parecki (Flickr)
