Una nueva disciplina quiere estudiar las interacciones de los sistemas de IA de la misma forma que se analiza el comportamiento en seres humanos.
La inteligencia artificial y el machine learning se basan en algoritmos que determinan las respuestas de las máquinas.
Para los humanos a veces es complicado comprender qué razones llevan al algoritmo a elegir una respuesta u otra.
Un grupo de investigadores ha decidido que los métodos científicos que estudian a las inteligencias artificiales basándose principalmente en estos logaritmos no son del todo efectivos. Este grupo de científicos innovadores propone crear una nueva disciplina académica que se conozca como Comportamiento de las Máquinas (Machine Behaviour). Su proposición se basa en estudiar a los sistemas de IA de la misma forma que se estudian animales y humanos, a través de observaciones empíricas y experimentación, según un artículo del MIT.
La persona encargada de estudiar este campo sería a un ingeniero informático lo que un sociólogo es a un neurocientífico. El primero analiza cómo un agente (artificial o biológico) se comporta en su hábitat e interactúa con otros agentes. El segundo busca entender qué mecánica hay detrás de esos comportamientos.
Iyad Rahwan, investigador del informe, cree que existe un aumento en máquinas autónomas y con poder de decisión, y por tanto deben ser investigadas como un nuevo actor con sus propios patrones de comportamiento.
No nos asustemos, esto no significa que las máquinas tengan libre albedrío. Simplemente, intentan que deje de verse a las máquinas como sujetos pasivos.
¿Cuál sería el trabajo de un académico del Comportamiento de Máquinas?
Sus funciones podrían ser interrogar a las IA, evaluar cómo las citas online han cambiado la forma en que conocemos gente, o cómo máquinas y humanos coexisten en diferentes áreas de trabajo.
Este punto de vista no es nuevo, la robótica ya levantó, hace años, interés en las interacciones entre ordenadores y humanos. Sin embargo, estos estudios se han llevado a cabo desde distintas disciplinas, como psicología o comunicación. La intención de esta nueva disciplina es crear un marco de estudio mejor definido que pueda centrarse en el análisis de las máquinas y su comportamiento.
