Windows 10 S y Surface Laptop son las dos grandes novedades en educación de Microsoft.
Tras un contexto en el que Apple logró ser el primer gran actor en educación para luego ceder su posición a Microsoft, tal y como ocurrió en el mercado general, la compañía de Redmond dominó hasta que Apple, con el iPad, volvió a cambiarlo todo. Sin embargo, en esta nueva era post-netbook, es Google quién ha logrado llevarse el mercado con sus Chromebooks, gracias a lo económico de su propuesta y a la nula gestión requerida a nivel de software en Chrome OS. Para cargar todos los datos del usuario en un nuevo ordenador es tan fácil como iniciar sesión con la cuenta de Google.
En un evento que Microsoft se ha centrado en educación, la compañía de Satya Nadella ha anunciado que fabricantes como Asus, HP o Dell, los más importantes del mercado, lanzarán ordenadores portátiles de bajo coste (a partir de 199 dólares) para competir con Chrome OS. Sin embargo, la gran novedad del evento es que estos equipos, y otros presentes en las aulas, correrán Windows 10 S, una versión recortada de Windows 10 centrada en la comodidad y seguridad para el usuario y en la facilidad de gestión para los administradores.
Según Microsoft, el tiempo de arranque para un ordenador de una red de Windows 10 S es de tan sólo 15 segundos, frente a cifras mucho mayores de carga del Windows 10 convencional. A esto se le suma que Windows 10 S es fácilmente configurable por pendrive. Es un movimiento que se acerca a Chrome OS, pero que ni de lejos se pone a su altura, pues como hemos dicho, la propuesta de Google está totalmente basada en la nube y configurar una nueva máquina no es más que iniciar sesión.
Los aspectos polémicos de Windows 10 S, sin embargo, van por otra parte. El nuevo sistema operativo está completamente centrado en sólo permitir instalar apps tienda de aplicaciones Windows Store siguiendo el discurso de la seguridad, y no permite modificar el navegador de serie (ninguno de sus grandes competidores se encuentra en la tienda) ni elegir motor de búsqueda, obligando al usuario a utilizar Bing. Los usuarios que deseen pasar a Windows 10 completo deberán pagar 50 dólares. Eso sí, la buena noticia es que Windows 10 S incluye licencia durante un año de la edición educativa de Minecraft y de Office 365.
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Por otra parte, Microsoft presentó «Surface Laptop«, un portátil táctil con pantalla de 13.5 pulgadas que llena el hueco libre que había en la familia para un portátil de gama media relativamente económico, pues el Surface Book representa la gama alta. Partiendo de 1.149 dólares, el Surface Laptop ofrece un chasis de aluminio que alberga diferentes configuraciones basadas en procesadores i5 e i7 de doble núcleo con 4, 8 y 16 GB de RAM.
Parece un portátil muy prometedor (Microsoft afirma que puede reproducir hasta 14.5 horas de vídeo en su pantalla de alta resolución), pero no llega sin aspectos negativos. Desde 2015, el puerto USB-C se está estandarizando entre los distintos fabricantes, pero Microsoft todavía no parece tenerlo en en cuenta y el Surface Laptop incluye solamente un puerto USB-A clásico y una salida de vídeo mini DisplayPort que bien podría haberse sustituido por Thunderbolt 3 con USB-C.
Surface Laptop llega para disputarle a Apple el puesto del mercado universitario en el que los de Cupertino lideran con el desactualizado MacBook Air, pero en cuanto a precios, se acerca mucho más al Macbook Pro. Teniendo en cuenta que llega con Windows 10 S (aunque hasta final de año pasar a Windows 10 es gratis), y que las opciones de precios no son demasiado competitivas pese a ofrecer panel táctil compatible con Surface Pen, en Europa puede tener difícil cabida.
