¿Sabías que existe una neurona artificial que puede recibir y liberar dopamina, la hormona del placer? Además, investigadores demostraron que también podría desencadenar movimientos en una mano robótica. Para descubrir más sobre este importante avance y cómo se asemeja al cerebro humano, sigue leyendo.
Este proyecto se hizo realidad gracias al trabajo de la Academia de Ciencias la Universidad de Correos y Telecomunicaciones de Nanjing y la Universidad Tecnológica de Nanyang en China junto al equipo de la Agencia para la Ciencia, Tecnología e Investigación en Singapur.
Lo interesante del estudio es que tiene gran potencial y uso a futuro. Según sus investigadores, se ha logrado un nuevo paso hacia la creación de una interfaz máquina-cerebro. También, puede comunicarse en ambas direcciones, es mediada químicamente y no se basa en señales eléctricas.
Combinar tecnología y ciencia tiene sus resultados. Para conocer qué es una neurona artificial y los hallazgos de sus pruebas no te pierdas lo que sigue. Descubre porqué esta tecnología innovadora va más allá de la inteligencia artificial y contempla estos desarrollos.
¿Qué es una neurona artificial y cómo funciona?
Conocer qué es este nuevo avance te permitirá conocer mejor cómo funciona y qué usos se le puede dar a futuro. A continuación, te hablaremos más de este avance tecnológico.
Básicamente, se trata de un dispositivo creado para enviar y recibir dopamina. Esta es una sustancia química, también llamada neurotransmisores, que liberan las neuronas y con los cuales las neuronas se comunican entre sí.
Un dato clave es que este tipo de neurona está diseñada para detectar la liberación de dopamina gracias a sus componentes. En esta neurona se destacan los siguientes elementos:
- Sensor electroquímico a base de carbono (grafeno) que detecta la dopamina.
- Memristor (dispositivo con plasticidad sináptica) que libera dopamina.
- Hidrogel sensible al calor que facilita el proceso anterior.
Si te preguntas, ¿cómo funciona esto? Te lo explicaremos ahora. Este sistema responde al proceso de exocitosis que libera dopamina en las células de ratas empleadas para el experimento. Este activa dichas células para formar así un ciclo de comunicación química similar al de las neuronas.
Los investigadores aseguran que, si bien la comunicación del cerebro es química, todas las interfaces cerebro-máquina actuales usan una comunicación eléctrica. Por tal motivo, crearon una neurona artificial que duplica la forma de comunicación de una neurona real.
Además, el memristor empleado en este avance puede regular la cantidad de dopamina necesaria. Se trata de un proceso similar al de las neuronas cerebrales que cambian la cantidad de neurotransmisores enviados entre conexiones, según estímulos externos.
Como ves, el funcionamiento de este avance se asemeja al proceso que se da en el cerebro humano. Ahora bien, si te interesa saber cuáles fueron las pruebas realizadas por los investigadores para conseguir tal descubrimiento, te lo contamos en seguida.
¿Qué experimentos se realizaron con este nuevo desarrollo?
Para crear la neurona artificial se realizaron ciertos experimentos donde se comprobó su capacidad de comunicación. Así, los investigadores usaron células cerebrales de ratas para probar que el dispositivo intercambiara dopamina como una neurona real.
Una prueba consistió en colocar el dispositivo creado sobre una placa de Petri junto a células extraídas de las ratas. Con ello, descubrieron que detectaba y respondía a la dopamina implantada que era transmitida por las ratas. A su vez, producía algo propio que se liberaba en las células cerebrales de dichos animales.
Otro de los hallazgos fue que al enviar dopamina a un nervio ciático podían activar el movimiento de un músculo del ratón. Esto lo usaron para mover una mano robótica.
Aplicaciones de la neurona artificial a futuro
Como te mencionamos anteriormente, existen diversas aplicaciones que puede tener una neurona artificial. Desde mover una mano robótica hasta ser parte de un dispositivo protésico. En tal sentido, el impacto de esta tecnología innovadora será a gran escala.
Aunque los científicos se encontraron con un volumen del dispositivo que limita su aplicación en una interfaz cerebro-máquina, esto no lo imposibilita para considerarse en prótesis médicas.
De igual forma, según sus creadores, este avance tiene un gran potencial que se expande a sistemas de aprendizaje avanzados. Gracias a sus capacidades, al comunicarse químicamente de dos formas, se convierte en una opción para interfaces diferentes con el cuerpo. Por tal motivo, desarrollos tecnológicos como el de la neurona artificial evidencian un impacto positivo en el mundo. Las neuronas, a pesar de ser células diminutas son esenciales porque participan en funciones claves como la del sistema nervioso y el desarrollo cognitivo. Así, mejoran la calidad de vida de las personas.
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