¿Te imaginas poder volar un avión con tan solo leer su manual? Esto es lo que puede hacer un robot piloto llamado Pibot, que ha sido creado por un equipo de investigadores en Corea del Sur.
Pibot combina la robótica con la inteligencia artificial de ChatGPT, una herramienta que le permite memorizar y comprender textos complejos en lenguaje natural. En este artículo, te contamos cómo funciona este increíble robot piloto, qué ventajas tiene y qué desafíos plantea para el futuro de la aviación.
¿Con qué objetivo se creó Pibot?
En esencia, fue creado para superar las limitaciones y los hábitos de los pilotos humanos.
Los investigadores del KAIST querían crear un sistema de pilotaje inteligente y adaptable. Uno que pudiera volar cualquier tipo de avión sin necesidad de modificar la cabina. Para ello, aprovecharon los avances de la robótica y la inteligencia artificial.
Este robot piloto es capaz de manipular todos los controles de vuelo. También está dotado de una memoria capaz de cargar en sus sistemas todos los manuales y cartas de navegación. Asimismo, puede comunicarse con otros pilotos y controladores, y responder a situaciones imprevistas más rápido que un humano.
Características clave de Pibot
Con una altura de 160 cm y un peso de 65 kg, su forma humanoide le permite ocupar el asiento del piloto. Esta forma también le brinda especial adaptabilidad para ocupar cualquier cabina de avión existente, sin necesidad de realizar modificaciones. Algunos de los atributos del robot piloto incluyen:
- Estar dotado de cámaras externas que le permiten supervisar el estado de la aeronave.
- Sus brazos y manos robotizados, con dedos articulados, que le brindan un control preciso de toda la consola de instrumentos.
- Un sistema de síntesis de voz incorporado para comunicarse con otros pilotos y controladores aéreos.
- Una memoria masiva capaz de almacenar toda la documentación de navegación aérea.
¿Cómo aprende el robot piloto?
El verdadero secreto de este robot piloto radica en su modelo de lenguaje. Ostenta la capacidad de comprender y memorizar manuales de vuelo mediante ChatGPT. Gracias a esta sofisticada IA, Pibot puede analizar textos sobre pilotaje y utilizar ese conocimiento para volar cualquier aeronave.
Las ventajas del robot piloto para revolucionar la aviación
En este fascinante escenario, este robot piloto emerge como el copiloto perfecto, listo para llevar a la industria aérea hacia un futuro lleno de posibilidades. Algunos ejemplos de estas comprenden:
- Mayor rapidez en situaciones críticas: gracias a su avanzada inteligencia artificial puede reaccionar y calcular rutas de emergencia mucho más rápido que un piloto humano.
- Adaptabilidad única para distintos modelos de avión: al poder leer y comprender manuales en cualquier idioma, se adapta en cuestión de minutos a volar nuevos aviones. Algo imposible para los pilotos de carne y hueso.
- Seguridad gracias a su ausencia de errores humanos: a diferencia de los seres humanos, Pibot no se cansa. Esto reduce el margen de errores y eleva los estándares de seguridad en el sector aeroespacial.
- Pruebas exitosas en simuladores de vuelo: actualmente, Pibot ya puede realizar todas las operaciones. Desde encender el avión hasta el rodado, despegue, crucero y aterrizaje en simuladores de control de vuelo.
- Amplias aplicaciones más allá de la aviación: debido a su forma humana, también podría ser utilizado para conducir vehículos terrestres y marítimos de manera autónoma.
¿Qué desafíos plantea Pibot para el futuro de la aviación?
Pibot es un robot piloto destinado a revolucionar la aviación y más. Sin embargo, plantea desafíos técnicos, éticos, legales y sociales. Técnicamente, debe funcionar en cualquier condición, ser resistente a fallos, ataques y sabotajes, además de ser compatible con sistemas existentes y cumplir con estándares de seguridad.
De la misma manera, éticamente, debe respetar principios como responsabilidad y transparencia. Por último, legalmente, necesita las licencias para operar un avión y estar sujeto a leyes en caso de incidentes. Sin embargo, y más importante que todo, socialmente debe generar confianza entre usuarios y pilotos, e interactuar de forma efectiva y respetuosa con diversas culturas.
Estos desafíos requieren un cuidadoso análisis multidisciplinar. Por esa razón no basta con crear un robot piloto, sino que es necesario integrarlo de modo seguro en un sistema complejo donde conviven humanos y máquinas. Asimismo existen diferentes perspectivas sobre el tema que pueden variar según intereses.
Ciertamente algunos pilotos ven a Pibot como una amenaza, e incluso competencia, mientras que los expertos destacan sus beneficios. Lo importante es considerar todas las opiniones para un desarrollo ético, seguro y sostenible de este nuevo tipo de inteligencia. Y, sobre todo, destacar que Pilot siempre estará bajo la supervisión del ser humano.
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