En lugar de guardar los gadgets viejos esperando que se deterioren y dejen de funcionar, lo mejor que puedes hacer con ellos es reusarlos y darles un propósito.
Durante el 2014 Samsung lanzó 56 modelos distintos de smartphones, HTC 27, Motorola 11, y Apple sus 2 iPhone. Esto nos daría un total de 96 dispositivos para escoger que vienen de apenas cuatro empresas, demostrando la enorme cantidad de móviles que salen al mercado todos los años y que nos hacen querer cambiar de teléfono rápidamente para poder ir a la par de la progresión de la tecnología. Si a esto le sumamos al resto de los gadgets que salen al mercado, como las tablets, los smartwatches, consolas de videojuegos, laptops, routers, etc., tendremos cientos y quizás hasta miles de objetos electrónicos para elegir qué comprar todos los años.
El problema con esta idea es que solemos acumular una gran cantidad de objetos electrónicos que quedan obsoletos en muy poco tiempo y que posiblemente se quedarán guardados en alguna caja, en algún cuarto oscuro que funcione como cementerio de gadgets, o que simplemente tiramos a la basura y contribuimos a los millones de toneladas que se producen todos los años en el mundo.
Si no tenemos ningún plan con esos dispositivos viejos, quizás deberíamos tratar de reusarlos para así alargar su vida y no contribuir a hacer más grande la pila de basura en el planeta, al menos por un par de años más.
Toma un smartphone viejo y conviértelo en un teléfono dedicado a VOIP
Quizás ya no tengas un teléfono fijo, pero si aún quieres tener un dispositivo adicional para recibir llamadas cuando estás en casa, en caso de que tu smartphone actual no esté cerca o se haya quedado sin batería. Para esto puedes tomar un móvil que ya no uses e instalar un servicio de llamadas VOiP como Skype, Fring o cualquier otro que te guste. Luego, lo único que necesitarías es mantener ese aparato cargado, conectado al WiFi y con la aplicación abierta para que cualquiera te pueda llamar.
Convierte una cámara web en un sistema de seguridad para el hogar
Si decides comprar una computadora portátil e incluso un monitor nuevo, lo más posible es que traigan una cámara web incorporada, así que, ¿qué puedes hacer con esas cámaras web que se colgaban de un clip? La mejor opción es convertirlas en un sistema de seguridad para el hogar. Para esto simplemente tienes que instalarla en un sitio donde quieras vigilar, conectarla a un ordenador y finalmente usar algún software especializado para que grabe todo lo que sucede. Existen muchas aplicaciones que puedes probar, entre ellas YawCam y ISpy Connect como dos de las mejores opciones gratuitas.
Usa un ordenador viejo como un centro de entretenimiento
Aunque ahora existen dispositivos como el Chromecast, que son muy económicos y pequeños, no tienes que gastar dinero adicional si tienes un ordenador viejo que ya nadie usa. Lo único que tienes que hacer es crearle un espacio al lado del TV e instalarle Kodi (conocido anteriormente como XBMC) que te ayudará a manejar una librería de películas, programas de televisión, música, fotografías y todo tipo de vídeos. Puedes instalar este software así tengas Windows, OSX o Linux, y además podrás conectar tu smartphone también.
Convierte un Android viejo en un Chromecast
Si sigues queriendo tener una fuente de entretenimiento sin tener que comprar un Chromecast o algo similar, también existe una opción muy viable: tomar un dispositivo Android viejo y convertirlo en uno. Para lograrlo necesitas comprar un adaptador MHL para poder conectar un cable HDMI al puerto USB del dispositivo. Luego necesitas instalar algo como CheapCast, LocalCast u AllCast en el Android para hacer streaming hacia la TV.
Automatiza tu hogar con un router viejo
Ya sabemos que las casas del futuro tendrán todo automatizado. Lo bueno es que no tienes que esperar tanto tiempo para probar cómo es apagar y prender las luces desde tu iPhone, porque puedes hacerlo ahora mismo si tienes un router viejo que sea compatible con OpenWRT. También vas a necesitar un Arduino (o una placa similar) y unos tomacorrientes e interruptores que puedan ser manejados con espectros de radiofrecuencia (RF). Es un proceso bastante más complicado que los anteriores, si te animas a hacerlo puedes encontrar instrucciones paso a paso en este enlace.
Imagen de portada: Jenica26